¿Cuantas horas tiene una vida?

Capítulo 5.

–¡Salud!-

Los cuatro amigos divertidos, chocaron sus vasos llenos de cerveza al unísono. La mesita de madera en medio de ellos, estaba cubierta con bocadillos y varias botellas grandes de alcohol. Reían y bromeaban recordando viejos tiempos y contando sus aventuras individuales.

–Pero amigo...- hablaba animado el hombre de cabello rubio brillante con una marca negra en forma de rayo –Fue una gran sorpresa cuando Ei nos dijo que volvías a Japón-

–Es verdad- el hombre de cabello negro, dejó su vaso vacío en la mesa y tomó una botana –Es genial tenerte aquí después de tanto tiempo, pero aun no nos dices cuantos días o meses te quedarás-

El hombre rubio ceniza suspiró –Eso es confidencial- comió una fritura y siguió hablando –Les puedo contar que estoy en una misión secreta, pero no puedo hablar mas sobre eso-

–Lo entendemos, no te preocupes- sonrió el de kosei eléctrico mientras se servía mas cerveza –Pero Ei ¿Qué dijo tu novio de turno sobre eso? ¿No se molestó?-

El hombre de cabello rojo suspiró –No le digas así. Se llama Daiichi y ya no somos novios- bebió otro sorbo de alcohol –Terminó conmigo hace unos días-

El de kosei de cintas le dio unas palmadas en el hombro –Vaya, duró mas tiempo de lo que creí- el hombre rubio brillante rió –Era muy celoso, pensé que romperían hace mucho ¿Cuánto duraron? ¿Cuatro, cinco meses?-

–Cuatro meses y 28 días- volvió a suspirar –Pensé que esta vez sí resultaría-

–Eso te pasa por aceptar a cualquiera- habló el de kosei explosivo mientras volvía a llenar su vaso –Deberías tener mas criterio para elegir pareja-

–Oye, todos merecen la oportunidad cuando son tan valientes para confesarse- hizo un puchero ofendido –Estoy dispuesto a aceptar su amor e intentar retribuirlo lo mejor posible ¡Nunca sabes donde estará el amor de tu vida si no sales a buscarlo!-

–Bueno, yo prefiero esperar a que llegue sin esforzarme- el de kosei eléctrico, hizo un ademán con las manos mostrando su punto de vista –Además, has tenido novios muy problemáticos- suspiró –Aun recuerdo al tipo hace dos años que quemó tu antiguo departamento-

–Sí, eso fue increíblemente peligroso- el de cabello negro, movió la cabeza en desaprobación –Si no fuera por tu kosei y la oportuna aparición de Kota, estarías gravemente herido-

–Lo siento por eso- suspiró pesado y dejó el vaso en la mesa –Nunca imaginé que se pondría así porque me vio con esa cadena puesta-

–¿Cadena?- preguntó interesado el rubio ceniza.

–Es una cadena que mandó a bañar en oro blanco para que no se oxidara. Nunca la he visto porque la guarda en su caja fuerte, pero Ei dice que se la regaló su primer amor y por eso es especial- el de kosei eléctrico tomó el resto de su cerveza y continuó hablando –¿Tu has tenido un primer amor, Katsuki?- el rubio ceniza lo miró –El mío fue una profesora cuando estaba en primaria y el de Sero fue Mina. Ei nunca nos a querido decir quien fue, solo sabemos que era un chico-

–Dudo que Katsuki alguna vez se haya enamorado- dijo divertido el de cabello negro –El amor es algo inútil- lo imitó haciendo reír al rubio brillante.

–Idiota, claro que tuve mi primer amor- los tres lo miraron con interés. El de kosei eléctrico lo invitó a continuar hablando –No tengo razones para contarles quien fue, ni cuando, ni nada mas sobre eso, tarados-

–Vamos, hombre- el rubio brillante insistió –Ya sabes el de nosotros ¡No es justo dejarnos con la intriga!-

–Tu lo dijiste solo- gruñó el de kosei explosivo.