𝐂𝐨𝐧𝐟𝐥𝐢𝐜𝐭𝐨 𝐩𝐨𝐫 𝐥𝐚 𝐁𝐚𝐬𝐪𝐮𝐞𝐭𝐛𝐨𝐥𝐢𝐬𝐭𝐚 ©

➼ Capítulo 06

Si de algo, podía arrepentirse Akane Hinata, era de haber respondido el mensaje que Kise le envío.

En realidad, no sabe cómo sucedió, simplemente vio y el mensaje y su cuerpo actuó por cuenta propia. Al principio creyó que hizo lo correcto, que ese simple mensaje animaría al chico de cabellos dorados, luego de su derrota contra Seirin.

Pero no que comenzaría a mandarle mensajes a cada minuto, y a cada hora.

Incluso la llamo, a las tres de la mañana.

Desde que Kise recibió una respuesta, una serie de preguntas comenzaron a llegar para la azabache, cosa que ella prefirió ignorar, sabía muy bien, que si le decía el nombre de la preparatoria donde estudiaba, a más tardar en la tarde, tendría al modelo en las puertas de Seirin, esperando verla.

Un suspiro se escapó de sus labios.

No era tiempo de pensar en Kise, tenía otros problemas más preocupes como...

—Tengo hambre. —Se quejo Akane estando completamente desparramada en una banca del patio tracero del instituto frente a la cancha donde el club de fútbol practicaba en sus tiempos de descanso. Sentada de forma correcta a su lado –casi en la punta de la banca–su compañera de clases y amiga, se giró automáticamente al escucharla decir aquello.

—¿Nuevamente te has olvidado tu almuerzo Akane? —Le observó escéptica consiguiendo que la aludida girase su rostro a observarla un largo tiempo. Realmente la contraria no podía creer que ese día se había olvidado de guardar su almuerzo que amablemente Ukyo se ofrecía en prepararle. Y la peor parte era, no llevar dinero consigo.

—Me he despertado demasiado tarde. Solamente me vestí y tome mi bolso para luego salir corriendo a la estación. —Espeto sonriendo con inocencia nada avergonzada con aquello. ¿Debería de avergonzarse por ser muy despistada o por su impuntualidad?—Creo que en el camino me he cargado a uno de mis hermanastros, pero no recuerdo a quien.

Lo único que recordaba era que el chico sostenía la parte izquierda de su cabello con unos clips amarillos.

—No tienes remedio, no has cambiado en nada durante todo este tiempo. —Suspiró y con una sonrisa divertida le tendió a la chica lo que quedaba de su almuerzo.

—Gracias Nao-chan~. —Con una sonrisa tomó el almuerzo y comenzó a comerlo con rapidez.—Ryōta me ha enviado las algunas fotos de su sección de fotografía. ¿No quieres que te las pase?

No solo fotografías, le había enviado, le había enviado hasta su rutina de trabajo como modelo, justo a sus horarios de clases en Kaijo.

Naomi Otori, además de ser amiga de Akane tiene una ligera obsesión por el joven modelo Kise Ryōta, su amor platónico desde la secundaria Teikō. Aunque tiempo después comprendió que el joven modelo jamás le prestaría la atención que ella deseaba y que nunca la miraría como lo hacía con su amiga.
Aunque eso no le impide fantasear con él como cualquier loca fanática.

—¿Me las pasas por mensaje?



—Estoy en casa—murmuró, mientras ingresaba a la residencia. Nadie responde su saludo, así que supuso que no había nadie.

—¡Ey!

Akane se dirigió a la cocina, dónde se sirvió un vaso con agua y bebió de este.

No podía esperar para llegar a su habitación.

Había comprado un nuevo videojuego, y no podía esperar más, para poder probarlo y sumergirse en las cuatro paredes de su habitación toda una noche.