Prólogo: ¿ Esto era necesario?

20 2 0
                                    

Vengan niños, les mostrare el temor de Dios" Sa 34:11

Dicen que la sangre es más espesa que el agua, que por cada nueva vida se crea un nuevo universo, más sin embargo nunca se podría vivir para el final del mismo universo, por años los seres humanos han sido observados, viendo su brutalidad, los numerosos baños de sangre, pero los seres humanos siempre aceptaron y esperaron hasta el día que su vida debía ser cegada y su llama apagada, con la esperanza de que del otro lado los esperaría un paraíso donde los esperarían sus seres queridos por toda la eternidad, más sin embargo todo era una vil mentirá.

Mientras la humanidad se sumergía en las llamas de un nuevo comienzo, una vista se posaba en el vestigio de lo que alguna vez fue el mundo mientras decía - ¿ Esto era necesario?- con una mirada de tristeza y melancolía el extraño evitaba mostrar sus emociones, pero antes de que dijera algo presintió que alguien se acercaba, una presencia que emanaba misterio.

- ¿ Qué haces aquí Azrrael?- pregunto el extraño a la presencia, - Vine a ver qué haces aquí, últimamente has estado muy distraído hermano - dijo la presencia llamada Azrrael dejando ver preocupación en sus palabras, el extraño solo sonrió levemente y centrándose nuevamente en el mundo.

- Sabes Azrrael, a veces pienso ¿cual es el motivo por el que estamos aquí?- dijo el extraño fríamente, - Cumplimos el deber que Dios nos encomendó hace mucho tiempo- respondió Azrrael con frialdad sin imaginar que al decir estás palabras el extraño solo podía responder con rabia y furia forzando lo a golpear una pared mientras decía- ¡No te atrevas a decir de nuevo eso!, ¡maldita sea!, ¡Dios no existe!, cuántas veces vas a creerte eso para justificar todo, eh -al decir esto sus palabras resonaban e imponían tal furia que los mismos cielos eran asolados por relámpagos y truenos que resonaban en el cielo nocturno.

Furico el extraño solo continuaba con la discusión mientras decía, - Solo observa mi creación, cuántas veces crees que la eh visto así - al escuchar las quejas del extraño Azrrael explotó en cólera al sentir que eso solo era una pequeñes comparado con lo que sus hermanos le pedían que hiciera - ¡ Crees que no me siento igual, tienes idea de lo que eh hecho, yo ni siquiera quería el cargo que nuestros hermanos decidieron para mí, crees que no lo sé!-

tales palabras hicieron al extraño arrepentirse de lo que había dicho, pero también en sus palabras se podía escuchar tristeza por Azrrael, debido a lo que sus hermanos le habían hecho.

-Esos imbéciles te volvieron a utilizar para esa máquina ¿ No es así?- el extraño le pregunto con preocupación y con tristeza en sus palabras Azrrael no tuvo otra opción más que confesar,- Ya me eh acostumbrado, de todas formas para nuestros hermanos solo soy útil cuando mato a su próximo profeta o para resetear la vida -

El extraño tomo los hombros de Azrrael y abrazando su cuerpo acarició las cicatrices donde antes solían estar sus alas tranquilizando su pena mientras por dentro su furia solo crecía más y más.

- Ven conmigo, si nos vamos de aquí, no dejaré que ellos te lastimen más -, confundido por tal insinuación, Azrrael no podía ver con buenas expectativas la proposición del extraño.
- P...pero.. pero Caín, eso va en contra de las reglas, está prohibido volver al mundo de los hombre -, al decir su nombre en voz alta el extraño nombrado Caín solo pudo enfadarse con su hermano pero sin perder su intención de que ambos fueran al mundo de los hombres.

- ¿ Nunca quisiste tener una vida? Ellos solo te utilizan para matar y poner sus mentiras en la historia de los humanos, a cuántos de nuestros sobrinos te han forzado a matar para satisfacer sus maquinaciones, tres ¿ no es así? Cirill, six y Jesús, vas a seguir siendo parte de esto-,decía Caín sin voltear su triste mirada de su hermano, al ver esto Azrrael solo podía darle la razón a su hermano.

La Orden de los CaídosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora