Y así comenzamos, repitiendo el patrón anterior, donde Dazai va caminando por las calles, a paso lento y descuidado, aunque esta vez más que por vaguesa, era por retardar su llegada, realmente no tenía ganas de ver la cara de Kunikida.
Pero finalmente, sin poder hacerse el tonto, llegó a las oficinas de la ADA, se paró frente a la puerta, pasó saliva, y entró cauteloso.
Cuando entró, no podía o más bien, no quería creer lo que veía. Al igual que Chuuya, alguien había ido de visita, y no era nadie más y nadie menos que él mismo, unos años más joven, claro, ¿Ahora con qué cara de burlaría de Nakahara?- Dazai - se paró recto Kunikida frente a él - ¿Hay algo que debas contarnos? - fungió una expresión serena, aunque no lo hizo muy bien, podrías notar a kilómetros el autocontrol que se exigía para no extrangular al suicida justo ahí.
Dazai, como no, pasó de su cara, y se paró con temor frente al adolescente, si no se equivocaba, tenía 16 años.
- Kunikida - lo llamó dándose vuelta - ¿Dónde lo encontraste
- hey, que no soy un perr- trató de acotar el Osamu menor, quien fue callado por sí mismo, pero adulto.
- me lo encontré cuando fuí a buscar algo a mi departamento, justamente salía del tuyo - hizo una pausa para ver al menor sentado tambalearse en la silla de oficina - y al principio pensé que eras tú, pero bueno, no lo eras... ¿Creo?
- ¿Qué haces tú aquí? - volvió a preguntar, pero esta vez viendo al mafioso joven. Todos en la agencia lo vieron algo sorprendidos por el tono de asco que usó al hablar.
El chico levantó una ceja, y sin prestarle mucha atención, se concentró en seguir girando, más aún así, respondió - ¿No lo sé? Simplemente aparecí en un departamento pequeño y mugroso.
- ¿Con qué derecho tú... - iba a acotar el propietario del departamento "pequeño y mugroso " pero fue interrumpido por cierto hombre de melena plateada.
- Dazai - él mencionado se giró rápido al escuchar al voz del hombre.
- Presidente - Hizo una pequeña reverencia en señal de saludo.
- ¿Qué está sucediendo aquí? - cuestionó el mayor, escondiendo sus manos en sus mangas como era usual.
- Bueno, déjeme explicarle... - comenzó Doppo, acercándose.
Mientras tanto, desee detrás, Yosano miraba levemente preocupada al chico.
- ¿Qué pasa con esa cara larga? - cuestionó la mujer acercándose y sentándose en una silla frente a él.
- Quiero irme.
- ¿A dónde?
- A mi casa, duh - Yosano levantó una ceja por la contestación, pero decidió volver a intentarlo.
- Sí, pero dime, ¿Dónde está tú casa? - claramente, el joven Dazai, no vivía donde lo hace el actual, y era mejor saber ese tipo de información por si acaso.
- En mi barrio.
- Ya... Pero, ¿Tu barrio?
- ¿Que dónde está?
- ¡Sí! - asintió feliz de poder empezar la verdadera conversación.
- Aquí, en Yokohama.
- ... Vale - se rindió.
- Tú, mocoso, acompáñame - llamó repentinamente Dazai de 22 al menor - vamos a llevarte a casa - tomó un abrigo que habia colgado, ya más tarde se lo pediría a Junichirou, y se lo lanzó a la cabeza - pontelo - su expresión era neutral, realmente extraño en Dazai - Rápido - chasqueó los dedos.
- Dazai-san ... No creo que esa sea la forma... - cuestionó un siempre inocente Atsushi.
- tú también vienes, Atsushi, así que apuremonos, que quiero llegar para la cena.
ESTÁS LEYENDO
Welcome Little One [Soukoku]
FanfictionTras sucesos extraños, en la Port Mafia aparece un adolescente de cabello naranja, quien no pertenece a esa época, más él no sería el único que aparecería en situaciones complicadas. Dibujo de portada: gorigori_rotta (Twitter)