Bailemos cuando nadie nos vea. Piloto

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Bueno, les contare la historia de cómo mi vida se fue a la mierda. Me llamo Nikolay, tengo 17 años, y todo mi futuro se fue a la basura, te contare el porque.


Era una tarde de verano, como todos los días estaba yendo a una de mis clases de baile. Oí el grito de mi mejor amiga "¡Nikolay!" , al oírla sabía que debía prepararme para un abrazo que me dejaría sin aire. Pasada la clase salimos de ahí para luego dirigirnos a una cafeteria que habia cerca, al llegar nos sentamos. --- ¿Que vais a pedir? --- Dijo el mesero, era tan guapo, que no podía dejar de verlo. ---¿¡Espera, desde cuando veo chicos!?--- Pensé, pero solo duro unos minutos esa atracción. Pedimos unos gofres y cafés. Al terminar salimos de ahi y fuimos para mi casa. Al llegar mis padres vinieron hacia mi y preguntaron ---¿Estas, estais bien?--- Al principio no entendia que sucedia, por lo que pregunte.--- Claro que estamos bien, ¿Por que no lo estaríamos?--- . A eso mi madre respondió.---Oh... Creo que no os habéis enterado, han encontrado a su compañero de clases Francisco... Desangrado en un callejón.---.

Mi alma se partió, y así empezó el inicio del fin.

Los meses pasaron, la gente olvido lo que sucedió. Yo no, creo que me obsesione. Seguí toda pista que podría haber, no llegue a nada. Al volver a clases, todo era distinto sin su presencia, el era la luz, el era mi mejor amigo, el chico que me mantiene feliz. Entre por la puerta del colegio, justo cuando la campana sonaba. Entramos a clase de geografía, al entrar noté caras nuevas, 6 alumnos nuevos. 

Sonó la campana del receso, salimos al patio, me compre una coca cola, y me senté en una escalera junto a mis amigues.

Volví a casa, mis padres me dieron una caja, con cosas de mi fallecido mejor amigo. Sentí tanto dolor que solo podía llorar, ni siquiera pude mantenerme de pie. Los días pasaron, nada interesante, hasta el primero de octubre. Encontraron otro cuerpo, esta vez encontraron a una chica del otro salon, me lleno de rabia, jóvenes con futuros brillantes a los que les arrebataron la vida tan temprano. Mi sed de venganza y justicia comenzaba a hacer presencia. Al otro dia, fui a clases como siempre, un chico se me acercó, era ese mesero que vi.---Hola!--- Me dijo con entusiasmo, a lo que respondió.---Hola.--- Asi, seco. Me pregunto que tal estaba, le dije que bien, y así pasaron las horas, volví a mi casa y me comenzaron a llegar notificaciones de instagram, estaban ensuciando el nombre de mi mejor amigo, diciéndole maricón, drogadicto, cobarde. Esto me lleno de ira

This is my realityDonde viven las historias. Descúbrelo ahora