❥Capítulo veintiuno.

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—Esto sí que es... Inesperado —dijo HueningKai, que estaba un poco nervioso—, pero oportuno. 

—Lo sé, te pido disculpas por ello —dijo SooBin, apenado por su tan inesperada visita.

—¡No te disculpes por eso! Fue inesperado de forma positiva, me alegró mucho tu detalle —explicó HueningKai, y sus mejillas estaban enrojecidas—. Te lo agradezco demasiado, me hacía falta un detalle como este.

A SooBin le preocupó lo dicho por HueningKai, que solamente se le ocurrió una cosa...

—No olvides que si necesitas de alguien, ¡aquí estoy! —SooBin abrazó a HueningKai, con dulzura y ternura—. Igualmente si no necesitas a alguien, lo respeto.

HueningKai quedó sin habla, nunca esperó un abrazo de parte de su gomita. Sin embargo, ¡justamente era eso que necesitaba! Unas pequeñas pero dulces palabras, que le transmitieron tanta paz al saber que tenía alguien para hablar. 

Lo único que hizo fue corresponder el abrazo de SooBin.

Y... Repentinamente, un pensamiento pasó velozmente por la cabeza de HueningKai... Más bien, como un sentimiento.

Me gustas, SooBin.

-hey, hey, ¡se viene lo bonito!-

Bubble gum - SOOKAIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora