Capítulo 9: Preparaciones

2 0 0
                                    

El resto del día me quedé observando el entrenamiento que mi madre le estaba dando a Ángela para lograr controlar más que solo el hielo y mejorar sus capacidades con la magia. Al pasar los minutos ella estaba llegando a su propio límite del desgaste que provocan los hechizos en el cuerpo humano, mi madre le dijo que descansara por el resto del día, me acerque a ella para hablar un poco por unos momentos...

+ Zik: Veo que no te resulta tan fácil [Se ríe].

+ Ángela: Vaya tienes sentido del humor después de todo... Quisiera verte en mi lugar.

+ Zik: Para mi suerte no puedo.

+ Ángela: Sabes eso es raro, a pesar de que tu madre viene de una dependencia de grandes magos.

+ Zik: Tal vez solo no este hecho para la magia...

En ese momento Ángela se sintió incómoda tras lo que pregunto, se quedó en silencio mirando hacia otra dirección hasta que se levantó con una sonrisa en su rostro diciendo que haría el doble de esfuerzo por ambos. Por la intensidad de sus palabras entendí de que estaba hablando en serio y no sabía cómo contestarle. Luego de unos minutos Ángela se levantó para irse a su casa no sin antes despedirse de nosotros con gran felicidad. Al día siguiente mi madre me despertó diciendo que hace media hora Ethan había marcado a nuestro hogar temprano pidiendo que en cuanto pueda le devolviera la llamada, le pregunta a mi madre de que se trataba, pero solo me contesto que no dio muchos destalles más que hiciera lo que me dijo o fuera a su casa. Le comenté a ella que me cambiaría antes de partir al hogar de Ethan para averiguar qué era lo que tiene que hablar conmigo, cuando estaba a unas calles de llegar a su casa comenzaron a verse grandes destellos. Preocupado al pensar que pudo ocurrir algo malo comencé a correr para estar allí lo antes posible, pero lo único que vi cuando llegue eran a Ethan y Gabe tonteando en su patio delantero. Me acerqué a preguntarles que fueron aquellos destellos que había visto antes me explicaron que estaban realizando unas pruebas con el prototipo de unos guanteletes que Ethan logro crear hace poco. Además de que estos eran capaces de generar electricidad y controlarla con facilidad de una forma similar a la que yo lo hago con el fuego.

Me contó que estaban compuestos de una aleación de metales que había creado junto a Xal Kimura un amigo nuestro. Dicho material eran resistente como el acero, pero al mismo tiempo este era flexible y capaz de conducir la electricidad sin riesgo alguno, debido a esto lo habían denominado como X-074. Me pidió que pasáramos a su habitación donde me mostraría en todo lo que estaba trabajando y planeado, en su escritorio había varios libro y hojas con notas y dibujos de diversos tipos. Por unos minutos me estuvo hablando de cómo sería el invento al final, el cual se trataría de una armadura completa capaz de absorber los elementos que controlan los demonios.

+ Zik: Noto que le estás dando todo el empeño a esto, pero pareciera que la haces para usarla como un arma ante los demonios...

+ Ethan: Solo piénsalo de este modo, podrá ser útil en algún momento además de que espero impresionar a los jueces de la feria donde quiero mostrarla.

+ Zik: Está bien... aunque me da un mal presentimiento sobre esto.

Él procedió a enseñarme los guantes que menciono antes, tenían un cristal extraño en medio de las palmas de estos, por curiosidad le pregunte en donde encontró algo como eso, él me contesto de que Xal se los envió porque él había estado de viaje por diferentes lugares en los últimos meses. Por un largo tiempo estuvimos hablando sobre lo emocionado que estaba con tan solo imaginar lo que podría suceder en dicha convención más adelante. Gabe algo aburrido le pregunto si ya había pensado en como llamar a su invento por lo que Ethan le dijo que ya tenía un nombre y que sería Proto Armadura de Tecnología Avanzada en Tácticas y Adaptación. Entre una risa Gabe le comento a Ethan que su invento era una patata muy futurista.

+ Ethan: ¿A qué te refieres con patatafuturista?

+ Gabe: solo junta las letras de cada palabra [mientras reía]

+ Ethan: P.. A.. T.. A.. T.. A.. Carajo debe de ser una maldita broma...

Ethan comenzó a gritarle a Gabe por un rato diciendo que deje de llamar a su invento de ese modo, yo comencé a reírme mientras ellos peleaban por eso. Por el resto de la tarde nos estuvo hablando de todo el esfuerzo que hacia junto a Xal en esto y que estaba esperando grandes resultados tras el gran trabajo, al mirar el reloj vi que dentro de poco comenzaría a oscurecer por lo que me despedí de los chicos para emprender mi camino a mi hogar.

Cuando llegué a mi casa Ángela aún estaba entrenando junto a mi madre y me sorprendí al ver una gran parte del lugar se había congelado por completo, noté que ella estaba exhausta del esfuerzo y apenas podía mantenerse de pie, por otro lado, mi madre no mostraba cansancio alguno. Ella le dijo que por el día de hoy había sido suficiente hasta que noto mi presencia.

+ Elizabeth: Al fin regresas, estaba por llamarte. Sabes que no me gusta que vuelvas cuando está muy oscuro.

+ Zik: Lo sé muy bien, por lo que veo acabaron el entrenamiento por hoy.

+ Elizabeth: Si y lo mejor será que descanse por una semana, además tengo algo diferente para ella.

+ Ángela: ¿A qué se refiere con eso?

+ Elizabeth: Lo sabrás en siete días, durante ese tiempo trata de descansar.

Ambas se mantuvieron hablando por unos minutos mientras tanto yo me quede sentado a las orillas del lago durante un rato, cuando Ángela acabo de charlar con mi madre tomo asiento junto a mí. Ambos nos quedamos observando nuestro reflejo en el agua, le pregunté si aún estaba dispuesta a continuar siendo la estudiante de mi madre. Algo molesta dijo que seguiría con esto, aunque cayera al suelo sin conocimiento, además de que ahora contaba con un control completo del hielo gracias a mi madre. Por curiosidad le pregunté si ella fue la que dejo congelado casi toda la casa, un poco avergonzada dijo que fue un 50/50 porque mi madre le demostró cómo debía hacerlo.

Por unos instantes había silencio puro entre nosotros donde solo podíamos escuchar el soplar del viento que movía el agua del lago, Ángela fijo su mirada de forma curiosa en mi collar diciendo que era interesante, ya que mi madre tiene uno igual. Pero de una tonalidad azulada, le conté que este le pertenecía a mi padre antes, serio se le formó un nudo en la garganta sin saber que decirme luego del error que cometió y por su mirada fija al suelo, dándome a entender que estaba arrepentida de ello. Coloque mi mano en su hombro diciendo que no tenía por qué sentirse así después de todo no sabía nada al respecto. Poco a poco estaba llegando la noche por lo ella tuvo que regresar a su casa y yo derretir todo el hielo que había quedado por ellas, por otro lado, la noche solo marcó el final de día.

The Crusade of the Demon: IgnitionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora