Capítulo 1: Otra vez tú.

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... Seis años después...

Me despierto como normalmente lo hago, apago la alarma de mi celular y voy directo a mi baño para lavarme la cara y hacer otras cosas.

Una vez que ya me cambié de ropa, tomo mi mochila y me dirijo a la sala donde están mis papás. Ellos son unos empresarios exitosos acá en Seattle.

—Adiós mamá, adiós papá.— me despido de ellos dándoles un beso en la mejilla y me salgo de la casa con mi chamarra en mano y mi mochila.

Aunque salí, logro escuchar un "Adiós Giselle" por parte de mi madre.

Es otoño y estamos en 2019 pero aún así sigue haciendo de repente frío.
Voy caminando con los audífonos puestos escuchando la canción que últimamente me está gustando, se llama Out of my league. No sé qué tiene la canción pero sea lo que sea, me pone de buenas.

Sí, mi escuela está a veinte minutos caminando. Cuando llego a la escuela, me dirijo a mi casillero y saco mis cuadernos y libros de las primeras dos materias que me tocan que son matemáticas y química. Cierro la puerta y me asustan.

—¡Boo! Jajaja siempre te asusto fácilmente, nena.— me dice mientras se ríe y se acomoda su cabello. Alissa Baker es una chica de carácter tierno pero a la vez fresón.

Para los que no sabían, fresón es un término colonial que significa con ser una persona que viene de clase alta y muy educada, generalmente se ocupa en America Latina como en México.

Bueno, ella es así, tiene un gran corazón y puede ser fría con quien quiere o al menos eso me dijo, pero una vez que fui su amiga, me ha demostrado que es una persona que vale la pena, es muy leal y siempre te ayuda en todo; ella es delgada y alta, su cabello por lo general siempre lo lleva suelto y lacio.

—Me espantas porque siempre voy con los audífonos.— le respondo caminando con ella hacia nuestro salón.

...Oh, se me olvidaba presentarme. Soy Giselle Evans, tengo diecisiete años y voy en mi último año de preparatoria, básicamente soy una persona súper normal en mi escuela pero por alguna razón me conocen todos. Nada en especial.

Tengo el cabello castaña y últimamente se me está haciendo chino, soy bajita y por el momento no tengo novio, necesito enfocarme en la escuela si es que me quiero graduar y entrar a una buena universidad.

—Ay nena, te debes de distraer con más cosas y conocer más personas.— me dice mientras entramos a nuestro salón.

Rio un poco —No gracias, así ando bien, además sí conozco a la gente que necesito conocer.— le respondo cuando me siento en mi lugar.

—Mmm okay, pero cualquier cosa me dices.— me guiña un ojo.

—Gracias, en verdad pero sabes que soy tímida.— le respondo abrazándola.

—Lo sé, de hecho ya quiero ver cuando tengas novio.— me dice sonriéndome.

—¿Por qué?— le pregunto frunciendo el ceño.

—Porque siento que tu futuro novio va a ser igual de tímido que tú pero eres muy linda y se que serán el uno para el otro.— me da una última sonrisa y se va con sus amigas.

No es que yo no me lleve con nadie, de hecho me hablo con todos pero a veces sólo me pongo en mi lugar y trago de imaginar.

—¡Giss!— me grita Katherine. Ella es mi mejor amiga, por lo general siempre llega tarde a todo pero esta vez llegó temprano a nuestra clase de matemáticas.

—Kath.— le respondo sonriendo y saludándola de beso cuando se sienta al lado mío. Katherine Lane es una chica alta y de cabello castaño, es más alta que yo y es una chica de alta clase.

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