¿Dónde estás?

Capítulo 3: Es él.

Giselle Evans.

Voy corriendo. Estoy corriendo en busca de Alissa, en busca de respuestas.

Trato de esquivar al mayor número de personas que puedo para llegar a tiempo a la escuela y buscar a mi amiga pero no todo es suerte ya que accidentalmente les tiro las cosas a personas que van hablando por teléfono y con las manos muy llenas.

¿Cómo es esto posible? ¿Cómo es posible que después de diez años te volví a soñar? No tengo la menor idea de por qué lo soñé o si eso tiene algún significado, no sé nada.

¡Aghhh! Me hubiera traído la patineta, no lo pensé, odio esto. Ya me cansé de estar corriendo.

Llego por fin al colegio y busco a mi amiga la cual está comprando una dona y un café.
—¡Aquí estás!— le grito y la abrazo antes de que tome su vaso de café.

—¿Qué sucede?— me pregunta extrañada ante la situación y nos salimos de la fila.

—El chico, volví a sentirlo, a verlo pero no consigo nada, ni un nombre ni una pista.— nos sentamos en la cafetería de la escuela.

—¿Qué chico?— me dice extrañada de lo que le pregunto.

—Soñé con alguien hace seis años, lo último que me dijo fue que nos volveríamos a ver y ayer lo volví a soñar pero pasó exactamente lo mismo pero esta vez me dijo que nos conoceremos pronto.—

—Okay esto es un tanto extraño pero tú no has detectado ninguna pista más bien, porque hay millones en ese sueño, por ejemplo, el lugar donde sucede.— me dice Alissa, y tiene toda la razón, me bloqueo ante la tensión pero es cierto.

—Era una playa... un centro comercial... un muelle.— le sigo tratando de recordar.

—Sólo una duda... ¿nunca has estado en esos escenarios? Es decir, ¿jamás has viajado a donde sea que estén esos lugares?— me pregunta pero niego con la cabeza.

—¿Ni los has visto en películas?— vuelvo a negar.

—Okay, es raro porque por la descripción que me dices, yo sé qué lugar es pero no lo voy a decir hasta que me des más detalles.— Alissa le da un sorbo a su café y come su dona.

La verdad es que no sé si esto es real o sólo es producto de mi imaginación pero cada vez es más extraño. Sé que esos lugares nunca los he visitado porque casi no salgo de viaje además de que nunca he ido a la playa.

—¿Cómo era él?— me pregunta mi amiga antes de morder su dona. Alissa es feliz comiendo donas, es su pan favorito pero ya me dio hambre.

—Él tenía cabello café, era alto y de piel clara pero algo que me encantó de él es que tiene una sonrisa hermosa, siendo honesta la sonrisa te enamora. — nos empezamos a reír, pero es en serio, lo más notable que tiene es su sonrisa perfecta y sus ojos.

—Ah, eso ya es otra cosa eh pero por lo mientras voy a anotar eso que me dijiste y tú tienes que hacer lo mismo, son detalles que aunque no digan mucho pues sirven para unir puntos.— saco mi celular y anoto todo lo que le dije para después pasarlo a una libreta.

—Otra una duda.— me dice y le levanto las cejas para que hable en lo que busco dinero para una dona porque de verdad que se me antojó. —¿No será algunos de tus ex novios?— niego con la cabeza riendo, ya quisiera ser alguno de ellos. Este chico de mis sueños es alguien que sé que es diferente.

Al momento de sonar la campana, Ali y yo nos levantamos para irnos a nuestras clases ya que el día de hoy nos tocan separadas, hasta donde recuerdo me toca con Kath y Anne.