Dar el paso (Álex)

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A pesar de que sé que me extrañó,
de que aceptó su error
me inquieta saber la verdad
si aquella fogata que encendí
en su corazón se mantuvo viva
o murió en el angustioso sonido
de las agujas del reloj.

Estoy dispuesto a cuidar su descendencia,
a amarlas más de lo que ya las amo.
Pero no sé qué piensa ella
que planea hacer con su futuro,
no soy adivino, ni brujo, ni mago
pues lo único que me queda
es dar el paso.

Debo plantearle mis sentimientos,
mis ideas y sueños,
no acobardarme y dejar pasar el tiempo
porque sino no aguantaré,
accionaré sin razonar
y tal vez cometeré un error
del cual nunca me podré perdonar.

De vuelta en la calidez hogareña
la nostalgia se me adueña.
El recuerdo añorado de sus rizos
me atraparon apenas los he visto.
Su mirada antes de doblar la esquina
a la par de su sonrisa
nos dio a los dos unos segundos de picardía,
allí nació mi esperanza que aún sigue intacta.

No puedo perderla de nuevo,
no como ese primer encuentro,
no como esa noche de ensueño,
mucho menos como esa correspondencia de enero.
Esta vez debo correr riesgos
para alcanzar mis deseos,
por una vez tengo que apostar,
dar el paso y tirar los dados.

Catalina Libutti

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