Como mi madre no tenia casa, nos fuimos a vivir a lo de mis abuelos maternos, era una casa enorme, con un patio gigantesco, el problema era mi relación con mi abuelo, nunca fue del todo buena, siempre trato de que yo sea perfecta, pero era gorda y según el no pertenecía a su familia ya que no tenia sus ojos celestes ni su pelo rubio, mi abuela, en cambio, siempre me apoyo.