¡Te Quiero Conmigo!

Volviendo a lo normal

Pasaron dos semanas, casi volando, después de todo el inconveniente. Nieves y Rubius habían vuelto a su isla, pero a diario volvían a casa de Vegetta y Akira. Las cosas volvían a la normalidad en Karmaland.

-¿Eh? ¿Al Nether?- preguntó desganado Rubius esa mañana que había ido de visita a casa de Vegetta.

-Si chiqui, tengo misión ahí- respondió Vegetta preparándose- no tienes que venir, es misión de Luzu y mía- agregó.

-Si peeeeroooo...-.

-¿Hablaste con los Dioses?- preguntó Vegetta- sobre lo de mover tu isla y el árbol al lado de mi isla-.

-¿Estás seguro? No crees que vayan a mandarnos a la ...-.

-Esa boca chaval!!!-.

-Jajaja ok boomer- lo observó colocándose su armadura- oye ten cuidado ¿si?- dijo desviando su mirada.

Vegetta sonrió y se le acercó para besarlo.

-Espera... aquí no... Akira y Nievnnnhh- sintió sus cálidos labios sobre los suyo y no pudo hacer más que ceder ante tan dulce sensación.

-Estaré bien- le dijo revolviendo su cabellos cariñosamente- ¿te traigo algo?-.

-Cabezas de whither y oro y diamantes y una de esas estatuas de cerdo para mi casa- dijo meloso- jajaja ok no, sólo regresa sano y salvo Vegetitta, que no quiero enviudar... soy muy joven aún- dijo divertido.

-Que tontito eres chaval- dijo poniéndose la mochila a la espalda- por cierto, ¿podrías ir a ver a mis Dinosaurios y cerciorarte de que tienen comida suficiente?- le preguntó mientras abría la entrada principal.

-Ok, los revisaré en un momento- dijo despidiéndolo con su mano en alto- pero... ¿el Megalodón también?- inquirió un poco nervioso.

Vegetta sonrió- no, déjame a Locus a mí, lo revisaré al volver- Rubius sonrió aliviado.

Detrás del portón se encontraba Luzu esperando a que su compañero saliera para comenzar con el encargo de Merlon y la misión encomendada por los Dioses.

-Hola Vegetta, buenos días- saludó animado Luzu.

-Buenos días ¿listo para la misión de hoy?-.

-Vaya, vaya pero de que buen humor nos encontramos hoy- dijo divertido Luzu.

-Yo siempre soy una persona muy feliz- se jacto Vegetta.

Luzu lo miró con una sonrisa- me alegro que lo seas Vegetoide-.

-Me siento más tranquilo ¿sabes?- dijo de pronto- desde que arreglamos las cosas con Rubius y lo tengo seguido en casa, me estreso pero me siento aliviado-.

-¿Te estresa pero te alivia?- río Luzu- ¿eso se puede?-.

-No sé, la verdad... realmente amo al tontito- suspiro con calma- oh y quería pedirte algo en especial Luzu, sé que me has ayudado mucho, pero...-.

-Lo que necesites Vegetta, pide y trataré de concedértelo- respondió Luzu animado de verlo feliz.

En la última semana y media, Rubius le había pedido a los Dioses el poder mover su isla y su casa del árbol junto a la de Vegetta. No fue tan sencillo, Rubius tuvo que hacer muchos méritos para volver a ganar la confianza de los Dioses, pero al final accedieron y de un momento a otro ya se encontraban cerca una isla de la otra.

Bobadas de la Autora:

Hoy tengo ganas de subir dos capis, así que subo este y otro más. En el siguiente capi va con dedicación a trinidap que espero que no te disguste lo que agregue a ultimo momento al capitulo ;) ya veras.