Pasaron meses para que me volviera a sentir de una manera atractiva, nunca me he sentido feo, pero siempre me ha gustado vestirme de manera ostentosa para mis amantes; Pero contigo me siento sexi estando en un bata de seda, en un traje de Dior, con unos shorts cortos, con tu camisa verde a rayas o desnudo, de cualquiera manera me siento sexi, mientras tú me desees de la misma manera.
Todo mundo dice que me gusta vestirme de manera provocativa y que me visto como si estuviera buscando algo, creo que no se equivocan con eso último, realmente si estoy buscando algo y a alguien, pero aún no lo encuentro o será que ellos no quieren ser encontrados, como sea el caso, me visto para poder encontrar a alguien que me deseé. ¿Te gusta cuando me pongo pantalones cortos?, puedo usarlos aún más cortos...tú tienes la última palabra.
No me gusta cuando la gente le prohíba al mundo los deseos más naturales a otros.
Es una injusticia quitarles el derecho a los humanos el de disfrutar nuestra sexualidad, es como quitarle a un niño su juguete favorito.
Te pido que me dejes disfrutar a más no poder de ti, de tu cuerpo, te doy la libertad de que hagas lo mismo con el mío. Permitámonos la libertad de disfrutarnos.
No me prives de la libertad de sentirme sexi, porque es lo único que tengo para hacerte disfrutar de mí.
Te hablo de esta libertad que tanto me gusta, que tanto que me hace feliz, porque es la libertad que quiero que me des y nunca me quites por más que me porte mal.
Hace meses que no me sentía libre, que no podía disfrutar de ella y no es porque no quisiera o porque alguien me la estuviera quitando, más bien yo soy el único culpable de que esa libertad fuera negada, yo mismo me negaba esa libertad...pero ahora que estoy contigo, me siento libre de nuevo, pero realmente libre, no tengo que explicarte nada porque tú ya me conoces de años y sería una barbaridad mentirte para ganarme tu libertad, cuando sin esforzarme, tú ya me las dado.
Pensé que tenía que volverme a inventar un personaje para cautivarte, pero creo que mi verdadero ser es el que te mantiene firme y agradezco enormemente este acto hacía mí.
Por fin puedo gritarle al mundo que alguien se enamoró de mí, de un don nadie, de un chiquillo caprichoso que pudo excitar al macho que es difícil de complacer, porque la realidad es que nadie puede complacerme a mí, así que estamos predestinados a estar juntos, de complacernos mutuamente.
