•Cʀᴏᴡɴ• [TXT]

cαթíԵմlօ 7-թαɾԵҽ 1👑

{Dios~ me ha encantado el nuevo disco de Blackpink, si lo habéis escuchado ya ¿que os ha parecido?😄💫}

{¿Os está gustando la historia? Quería daros las gracias a todos aquellos que estáis apoyandola, no sabéis lo feliz que me hace saber que os gusta, ya que me ntran más ganas de continuarla💕}

"ᴇʟ ᴀʙʀᴜᴍᴀᴅᴏʀ ʙᴀɪʟᴇ ᴅᴇ sᴏᴍʙʀᴀs"

El agua fría ya estaba haciendo efecto,  después de haberle sumergido completamente en ella Soobin se dio cuenta de que porfin estaba volviendo en sí.

– ¡Como se te ocurre emborracharte! Y encima en un bar como ese!– le gritó Soobin– ¡A saber que has tomado!

Yeonjun yacía semi inconsciente dentro de la bañera, todavía con la ropa puesta, mientras el príncipe del Norte seguía tirandole cubos rebosantes de agua fría en la cabeza.

Con las mangas recogidas y arrodillado a su lado, Soobin continuaba intendolo aunque Yeonjun no pusiera de su parte.

Que debía de esperar de él, después de habérselo encontrado borracho bebiendo en una taberna de mala muerte.

– ¿Q-que...hago aquí?

Soobin se asustó al escuchar aquella voz derrepente y además en un tono tan grave.

– No sé dímelo tú~– dijo con ironía– Hace unas horas te encontré totalmente borracho en una taberna ¿que querías que hiciera?

Yeonjun todavía estaba desconcertado, observaba la bañera sin comprender muy bien lo que estaba pasando y porqué estaba él ahí.

– Espera...– murmuró pensativo– ¿Me estabas bañando con la ropa puesta?

– ¿Acaso querías que te la quitará? Si fuera por mí lo hubiese echo pero prefería respetarte y más en el estado en el que te encontrabas.

Yeonjun cada vez estaba más confundido con Soobin, cuándo lo conoció parecía alguien tímido aunque luego se dio cuenta de que le encantaba hablar y ahora sacaba esté tipo de comentarios, haciendo que el príncipe del Sur no supiera que pensar realmente de él.

– Dejémonos de tonterías y ponte el pijama de una vez– le ordenó Soobin mientras se ponía en pie– Hoy debés de descansar bien para mañana

– ¿Porqué?– preguntó Yeonjun mientras observaba al príncipe con ojos cansados.

– ¿Acaso se te ha olvidado? Mañana es la ceremonia de talentos y debemos de descansar bien, así que vete a dormir pronto

Y dicho esto Soobin salió del baño, dejando completamente solo a Yeonjun.

– ¿Pero que le pasa?– se preguntó así mismo

Y antes de que cualquiera se percatarse, la noche de la ceremonia había llegado.

La mayoría de criados iban de un lado al otro acabando los preparativos; sirviendo la comida, decorando la entrada o colocando las tarjetas con los nombres encima de cada una de las mesas.

Mientras tanto un par de chicos se encontraban tumbados en el césped de la entrada, pasando inadvertidos gracias a la oscuridad de la noche.

– Así que te gusta el helado de fresa– murmuró Hueningkai, mientras miraba el cielo nocturno

– Bueno, en verdad prefiero la frambuesa– le contradijo Jeongin, tumbado a su lado

Hueningkai no supo que decir durante varios segundos, era su primer amigo así que todo aquello era nuevo para él.

– ¿No crees que se daran cuenta de tu ausencia?

– Lo dudo, tampoco es que les importé mucho, simplemente soy uno más del grupo– le contó Jeongin

Ambos se quedaron observando el cielo estrellado, cuando se escuchó un traqueteo a lo lejos, parecido a las pisadas de un caballo.

– Esos deben de ser los carruajes– dijo el criado poniéndose en pie– Así que será mejor que yo vaya entrando, si quieres puedes quedarte para recibir a tus padres.

Hueningkai asintió con pesadez ¿realmente tenía que volver a verles?

Después de que el joven criado volviera al interior del palacio, los carruajes comenzaron a llegar. Y los demás chicos salieron a recibirlos, al igual que Kai.

De uno de los primeros, salió un hombre corpulento, con una gran barba y una corona plateada sobre su cabeza.

– ¡Padre!– gritó Beomgyu, corriendo hacía él para lanzarse a sus brazos

El hombre sonrió al ver la alegría con la cual su hijo le habia recibido. Y aunque fuese en contra del protocolo le dejo abrazarle un rato más.

– ¿Como ha estado mi pequeño príncipe? Te han dado buena comida?– le preguntó el hombre

Beomgyu todavía con una sonrisa en su cara, se separó un poco de su padre para poder mirarle a los ojos, aunque todavía lo estuviese abrazando.

– He comido bien padre, no sé preocupe– le afirmó el rubio– Taehyun me ha estado cuidando muy bien– le susurró

El señor Choi sonrió con cariño, obviamente sabía de la buena relación que tenía su hijo con el príncipe del Éste. Y lo difícil que era para ambos ocultarla, siendo tan cercanos.

Mientras tanto el resto de principes obervaban con cariño la escena padre he hijos. Pensando porqué sus familias no eran como la de Beomgyu y la suerte que esté tenía aún viniendo del reino más pobre de todos.

Porqué aunque no tuvieran grandes riquezas contaban con un gran corazón y un rey bondadoso, que amaba a su pueblo y a su familia. Que rescindió de su corona dorada para poder pagar los impuestos de todo su pueblo, cuando éste estaba pasando por la peor crisis económica del año.

Entretanto un grupo de cinco chicas abandonaban su carruaje en dirección al palacio real. Con la idea de infiltrarse de una vez allí dentro y dar a conocer al mundo su opinión. Llevando armas bajo sus vestidos con la intención de que aquel día fuese recordado por el resto de los siglos; "como el día en el cuál la corona sufrió su mayor atentado".

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{¿Que os a parecido el capítulo🥰❤}

{No os preocupéis, en el siguiente capítulo ya tendréis la acción que estáis esperando ¿que acabará pasando?🌸😅}

{Nos vemos en la próxima actualización, chao👋}