mike anhelaba ser besado por will, poder sostener su mano y llamarlo novio. lástima que sentía que sus sentimientos no eran correspondidos por el mencionado.
antes de que sea muy tarde, amarrame con besos
𝗯𝘆𝗹𝗲𝗿
proximamente en su última edici...
LLEGAMOS A LAS 10K DE LECTURAS muchísimas gracias a todos y todas, no saben cómo me alegran el día con sus comentarios de verdad muchísimas gracias, les amo.
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Mike caminaba tranquilamente de la escuela hacía su casa, se sentía cansado, realmente cansado la universidad lo estaba consumiendo.
De camino decidió pasar a rentar un vhs, era viernes así que quería pasar su tarde viendo películas, haría la tarea mañana.
Decidió rentar la película de El resplandor, desde hace tiempo tenía ganas de verla pero no había tenido tiempo. También compró palomitas y un jugo de uva.
Mike aventó su mochila a algún lugar de su cuarto, se quito los zapatos, sacó su comida y comenzó a reproducir la película. La película transcurría bastante bien estaba muy interesante.
-¡Mike!-Mike salto debido al grito de su madre, esto provocó que algunas de sus palomitas salieran disparadas en el aire.
Mierda ahora que paso, pensó el rizado.
-¡Que pasó Madre!-Al igual que Karen, Mike también grito.
-¡Baja un momento por favor!.
Carajo, ni una puta película puedo ver tranquilo.
Mike molesto se coloco sus zapatos, salió de su habitación y maldiciendo internamente bajo las escaleras. Sea lo que sea debería de ser bueno.
-¿Cuál es la urgencia madre?-Preguntó Mike dirigiéndose a a la cocina donde su madre estaba preparando la cena.
-Tu amigo Will está aquí, dice que necesita algo, ve a buscarlo esta en la sala- Mike se sorprendió mucho, sus ojos estaban abiertos.
Tenía tiempo que no veía a Will, la universidad no los había dejado verse, ente tantos trabajos y tareas era imposible. La última vez que lo vio fue hace más o menos un año, fuera de ahí no lo había vuelto a ver más.
Que necesitaba de él, ¿Apoyo en alguna clase?, No lo creía, Will era demasiado inteligente.
Mike se dirigió a la sala y lo vio, seguía siendo el Will de siempre, solo un poco más alto no tanto a comparación de él pero su había crecido al menos unos centímetros. Su playera a cuadros y sus shorts de siempre, Mike dudaba como aún le quedaban esos shorts.
Sin decir una palabra Mike tomó asiento alado de él.
-Hola Will- El pelinegro volteo a verlo.
-Hola Mike- El Cataño igual volteo a verlo.
Un silencio se formó, ninguno sabía que palabra articular, Will jugaba con sus dedos nervioso y Mike movía su rodilla. Se habían distanciado, si eso era obvio, un año sin verse fue demasiado. No sabían cómo lograr una conversación.
