Capítulo 2

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Apenas lo veo quedo totalmente pasmada, y todas las reglas de juego, todo el arrepentimiento, todo el cuento del asistente se esfuman de mi cabeza y quedo en blanco. No salgo de mi asombro hasta que escucho la voz de mi papá llamarme por mi nombre completo.

Torpemente me paro y saludo al hombre que acompaña a Ruel. Luego, miro al cantante y le digo 'mucho gusto' con la voz en un hilo y tendiendo la mano, que estrecha con firmeza. Sin siquiera darme cuenta, voy recopilando toda la información que recibo de él. Noto lo grande que es su mano, y la fuerza que tiene; también que es alto, muy alto. Tiene el pelo mucho más claro de lo que pensaba, rubio oscuro, le cae en cascadas por los lados. Sus ojos... sus hermosos ojos son verdes pasando a miel, grandes como sus pestañas. Tiene cejas perfectas. Pómulos firmes, levemente marcados. Mejillas ligeramente sonrosadas. Y labios rosados, abundantes. Veo como estos se extienden en una amigable sonrisa, que devuelvo sin pensar.

Una vez suelto su mano, él se dirige a la esquina de la mesa en la que se encuentra su acompañante y se sienta a su lado. Este le susurra algo al oído y él asiente. La junta comienza. Papá vuelve a saludarlos a todos dándoles las gracias por venir y dirigiéndose a Ruel, agradece que él escuche su propuesta. 'Es un honor tenerte aquí' dice entusiasmado. Empieza a hablar de cómo la disquera le puede proporcionar una publicidad mucho más grande en Estados Unidos y los planes que tienen para dársela; de cómo los contactos que tiene esta lo pueden llevar a shows importantes como el de Ellen DeGeneres y cómo pueden conseguirle grandes espectáculos por acá. Oigo hablar a mi papá, de vez en cuando los ejecutivos hacen comentarios igual que el compañero de Ruel. Entre tanta información intento encontrar sin suerte el propósito de la reunión, pero no consigo prestar suficiente atención para descubrirlo.

Me quedo viendo a Ruel, intentando ser disimulada, pero aún sigo algo atónita por la situación, así que no confío mucho en que lo esté haciendo bien. Todas las dudas que me despertó el concierto vuelven a mí, como si hubieran desaparecido por unos cortes comerciales y la película volviera a reproducirse en mi cabeza. ¿Me reconoció al saludarme?, ¿se acuerda de lo que pasó en la canción?, ¿será que puedo dejar de ser una ilusa?, termino regañandome cada vez que cuestiono la situación. Me concentro en lo que dice mi papá, intentando dejar de pensar en todo ese asunto.

-Podemos hablar con Finneas, si lo desean. Tenemos varios contactos en su disquera. Así que no habría mucha dificultad en ponerlos juntos en una misma sesión de escritura, en varias si quieren, tal vez Eilish los pueda acompañar.

-Se refiere a Billie, ¿cierto?-, pregunta el único hombre, aparte de Ruel, con acento Australiano.

-Así es.

Continúan hablando de lo que parece ser una posible colaboración entre Billie, Finneas y Ruel. Kay me contó que ellos son amigos, por lo que dudo que esta colaboración sea el quid de la reunión. Me vuelvo a ver a Ruel, para ver si logro descifrar por qué está él aquí, hablando con una casa discográfica americana, pero más que todo porque simplemente no puedo dejar de mirarlo, sabiendo que está ahí. No puedo ignorar su presencia. Sin embargo, su rostro no revela ninguna intención sobre la propuesta que escucha, o parece escuchar. Lo único que noto (además de concentración) es aburrimiento, parece como si hubiera sido obligado a asistir.

Me fijo en su atuendo. Es el más informal de todos en el lugar. Usa una camiseta de botones, de mangas cortas, blanca y con rayas negras, una chaqueta de jean gris y unos pantalones negros. En el concierto tenía una camiseta del mismo estilo al que tiene ahora, pero oculta por un saco azul oscuro, con unos jeans negros. Tiene estilo, pienso en mi cabeza.

Debo de haberme quedado mirandolo con mucha firmeza, o tal vez lo hice con demasiadas ganas, porque de repente me mira, muy decidido, si es que así se puede ver a alguien. Y como si el mismísimo diablo me estuviera viendo, quito la mirada lo más rápido que puedo, con el estómago apretujándose en un pequeño agujero negro que nace de los nervios. Empiezo a escribir las primeras cosas que se me vienen a la cabeza, simulando anotar algo sobre la reunión:

Lo que pasa delpués del concierto - RuelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora