23.

35 6 6
                                    

Hasta los demonios se pueden enamorar

Narrador

La campanas de la iglesia estaban presentes dando a entender de que pronto iba a empezar un nuevo día de misa claro a varios de echo la mayoría de adolescentes na quisieran estar en una un domingo por la mañana bueno todos menos los que realmente son creyentes de la palabra ya que si a pesar de varios años después de que los humanos dejaran de ser la especie dominante ahora en el planeta Mobius sus creencias habían prevalecido a través de varios años incluso varios Mobians tambien creían en esa idea uno de tantos era el zorro que tenía como nombre Lian cuando había empezado a experimentar por si mismo lo que era tener a un ser oscuro que no sabías que era y mucho menos lo que quería de ti pero lo que si tenías muy en claro era que te seguía a donde sea que fueras sin importarle que día fuera ademas de que de vez en cuando te daba unos sustos que hasta parece de que te daría un ataque de nervios junto con algo de paranoia en conclusion estaba ahí desde que noto que el demonio lo estaba siguiendo para poder sentirse algo mas seguro de cierta forma y estar mas tranquilo.

- (aveces creo que venir aquí realmente no me ayuda aun puedo sentir como esta aquí a mi lado) -pensaba mientras estaba limpiando el piso hace unos momentos termino la misa de antes y debía estar todo bien presentable para la siguiente que sería en unas dos horas- (pero ¿Y si solo quiere hacerme pensar eso?)

- ¿De nuevo estas pensativo Lian? -escucha una voz familiar y mira a Dax sonriendo calmado- se ve que te hace falta algo de compañia aquí eh -

- Dax es bueno verte por aquí -se acerca a su amigo dejando por un momento su trabajo para poder hablar con este mismo- y si creo que tienes razón necesito hablar de esto con alguien como un amigo -

- un amigo como yo ¿Verdad? -se acerca al zorro dandole un abrazo el sabía que lo necesitaba pues notaba cuando este se sentía muy nervioso- tranquilo aquí no te va a pasar nada -

- lose pero tengo que irme pronto lo sabes no se puede vivir en una iglesia -corresponde el abrazo quedandose a su lado para calmarse- por eso estoy así no quiero salir para volver a sentir esa presencia tan terrible que es la suya -

-le miraba a los ojos tranquilo intentando calmar al zorro- pero sabes que debes salir eso lose Lian vamos puedes con esto eres fuerte te conozco y puedes contra ese demonio -le da palabras de animo-

- tienes razón -el mayor por edad pero no por apariencia le sonrie- gracias por la charla Dax eres un buen amigo -le regreso el abrazo feliz-

- no es nada sabes que siempre estoy aquí contigo -este erizo se miraba a si mismo en un espejo que estaba detras del zorro mirandose que ahí se veian sus ojos rojos y cuernos ya que apesar de estar transformado en alguien común y corriente aun se podía ver algo de su verdadero ser en cosas que captarán imágenes- siempre estoy aquí a tu lado -sonrie mostrando sus dientes en el reflejo se veian a estos afilados medio deformes-

- jejeje si lose -se separa del abrazo apenas voltea al otro lado el "erizo" se había apartado de la vista de ese espejo para evitar su propio reflejo- solo dejame terminar de limpiar y podremos ir a nose ¿Comer algo? -

- suena bien -le miraba desde donde estaba atento a cada movimiento del contrario desde ese día siempre le gustaba verlo hacer cualquier cosa sin importarle que fuera hasta quería seguirlo al baño pero el zorro si que se encargaba de ese asunto usando diferentes metodos de protección antigua para que no pudiera pasar-  

Cuando el Zorro termino de limpiar el piso viendo de que todo el templo estaba en orden empieza a caminar junto a su amigo por el pasillo que estaba en medio de las sillas hasta llegar hasta la puerta aun no quería salir no quería volver a sentir esa presencia malvada de nuevo pero tenía que hacerlo el debía y lo sabía así que dando un paso hacia adelante sale empezando a sentir de nuevo esa presencia justo a su lado aveces era muy perturbador que podía sentir esa presencia hasta lo mas profundo de su alma.

- aveces solo pienso que esto nunca va a acabar sabes -sigue caminando ya no miraba tanto a los lados porque sabía que aunque lo hiciera no iba a ver a nadie cerca de ahí aparte de su amigo- solo pienso en rendirme -

- Lian -el otro le miro sin poder creerlo ¿Acaso por fin estaba aceptando lo que estaba pasando? Era difícil de imaginar eso- ¿Porque lo dices? -

- estoy cansado de pelear contra algo que ni control tengo -el zorro miraba el cielo respirando profundamente intentando calmar sus nervios que cada vez parecían ser mas grandes- ¿Tu que dices es mejor dejarlo? -

-el "erizo" hace que el otro le mire a los ojos para hablarle de forma directa- que es una enorme tontería ya que tu eres Lian el zorro mas luchon que e visto en mi vida has echo tantas cosas que ni yo mismo sería capaz de lograr ni en cien años luchas todos los días contra algo malvado ¿Y quieres tirar todo tu trabajo a la basura? Pues dejame decirte que apenas lo hagas tu mismo la vas a levantar ya que es lo que harías yo te conozco y se que eso va a pasar -le habla firme-    

- tienes razón -el zorro aprieta su puño estaba decido de nuevo como si ese fuego dentro suyo que no dejaba que se diera por vencido así de fácil se hubiera entendido de nuevo esta vez con algo mas de fuerza como las otras veces que estaba por dejar todo- gracias siempre sabes como hacer que luche de nuevo -ambos van a comer algo a un local cercano como siempre el "erizo" escoge la mesa primero antes de que Lian pudiera hacerlo para evitar estar cerca de algún espejo ya que si era ese demonio que siempre lo seguía a donde fuera pero se hacia pasar por alguien que ni existía en alguna parte a este le gustaba mucho la parte decidida del zorro ver esos ojos negro llenos de esa llama de pasion por avanzar le encantaba no lo iba a negar.        

LO QUÉ ÉL AMOR PUEDE LLEGAR A HACERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora