KSJAKJA decidí actualizar esto primero pq yo también disfruto leer esta cosa y pues ando inspirado, en resumen: sexo.
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Despertó agitado, ¿solo había sido un sueño?, ¿Sasuke no estaba? ¿No habían invadido su cabaña? Se hayaba adormilado, confundido, un poco alegre y excitado, de todo un poco
Estuvo por soltar un suspiro de alivio hasta que sintió un cuerpo y un aroma pesado sobre el suyo, entre sus piernas "ay no"
-Naruto -distinguió la ronca voz de Sasuke, quien habló directamente en su cuello, ocasionándole un estremecimiento a su cuerpo. -Sasuke... -devolvió el llamado, temblando un poco al sentir como el Alfa sobre él inhalaba casi con desesperación el aroma que debido a su celo sin querer desprendía
-Te marqué
-Lo sé
Silencio, en la cabaña abundó el silencio por unos minutos, hasta que el Uchiha decidió romperlo; pronunciando palabras que Naruto pocas veces había oído provenir de este
-Lo siento, lo siento mucho. Yo no quería... Si quería pero no debí haberlo hecho así, lamento haberte atado a mi y a mi mierda sin saber si tu estarías de acuerdo -Sasuke se apoyó sobre sus codos, mirando fijamente al sonrojado rubio, dispuesto a seguir pidiendo disculpas
-Teme yo- Fue interrumpido
-Yo llevo años deseando esto, pero perdón, la mordida ya cicatrizó por qué la lamí mientras dormías, no tienes por que estar conmigo si no quieres
-Sasu ah- Interrumpido de nuevo, frunció el ceño
-A mi siempre me has gustado, aunque he sido un poco bruto contigo prometí que no volvería a lastimarte, solo...
-¡UCHIHA-TEME YA CÁLLATE Y DÉJAME HABLAR! -El rubio posó sus manos sobre la boca ajena, logrando por fin callar a su Alfa. -En primera, me parece un poco fuera de lugar que me pidas disculpas mientras estoy semi-desnudo -y era cierto, puesto que únicamente se hallaban tanto él como el Uchiha en ropa interior
-Segundo, me alegra que hayas sido tú quien está aquí ahora y no otro Alfa -miró fijamente los ojos del Uchiha, quien también miraba los suyos de manera intensa, demasiado intensa. Suspiró, debido a que había dormido, su celo se había calmado, pero al sentir una fuerte contracción en su estómago se dio cuenta de que la calma estaba llegando a su fin.
-Tercero... -se preparó para lo que diría a continuación, cerró sus ojos con fuerza y sin pensarlo más solo dijo -¿Que no ves que estoy en celo?, ¡deja de pedir disculpas y solo metemela hasta que llore!
Sintió el trabajador cuerpo sobre él tensarse y decidió tentar su suerte
-¡Hazme unos cachorros teme! Estoy mojado y cansado de estar usando los dedos, ¡Quiero sentir una verga en el estómago! Yo-
