“¿Un error? ¿Qué error?” pregunto incrédula.
“Mírate. No puedo hacerte feliz.” Parece angustiado. “Debo, quiero protegerte” se auto-corrige “y si para eso debo de seguir ordenes de McCann, lo hare”
“Jason me importa en lo absoluto” contesto frunciendo el ceño. “Pero tú me haces feliz”
“En este momento, no. No cuando hacemos lo que hacemos, lo que tenemos que hacer”
Oh, Dios… Esto se acaba. A esto se reduce todo: incompatibilidad… y de pronto todas esas pobres escenas me vienen a la cabeza. Jason diciéndolo lo que debe de hacer.
“Nunca conseguiremos superar esto, ¿verdad? No logramos superar las expectativas que ambos teníamos sobre esta relación” le susurro, estremecida de miedo.
Menea la cabeza con tristeza. Cierro los ojos. No soporto mirarlo.
“Bueno, entonces más vale que me vaya” murmuro e intento ponerme de pie.
“No, no te vayas” me pide.
“Ya estaba dicho que me iría, no encuentro lo negativo en hacerlo antes.”
Quiero irme ya. Salgo de la cama y Justin me sigue.
“Voy a vestirme.” digo mientras me marcho al cuarto de baño y lo dejo solo en el dormitorio.
Termino de ducharme y, como no me he lavado el pelo, me seco enseguida. Me
Visto en el baño, y saco los vaqueros y la camiseta de mi maleta pequeña.Me agacho para cerrar la maleta y veo la bolsa con el regalo para Justin por su cumpleaños: unos pequeños suvenires que compre en Paris y la revista donde saldría nuestra foto junto con un álbum de fotos que le había preparado. .
Los pongo en mi bolso de mano para dárselos antes de irme. Aun faltaba cuatro meses para su cumpleaños, pero no estaré aquí para esa fecha, y estoy segura que no volveré exprofeso a darle el regalo.
Me miro en el espejo. Me recojo el pelo en un moño. No puedo creer que me iré. Inspiro hondo, cojo la maleta y, después de dejar los regalos con mi nota encima de su almohada, me dirijo al salón.
Al bajar, hecho un vistazo al salón y pienso que hace solo unas horas estaba sentada con el haciendo los deberes escolares. Han pasado muchas cosas desde entonces.
Justin está hablando por teléfono. Viste vaqueros negros y una camiseta. Solo tiene puesto un supra, al lado de el está el otro. Rio internamente, se ve lindo.“¿Y que pu*tas quería que hiciera?” Grita, sobresaltándome. Pues no fuiste tan especifico como deberías” Alza la vista y no aparta su mirada oscura y pensativa de mi “Hice mi parte” espeta, y cuelga. Y no sé porque pienso que está hablando con McCann.
Me acerco al sofá y pongo ahí mi bolsa de mano. Saco la cámara fotográfica, y tomo una foto sin flash al living del apartamento donde no viviré. Siento su mirada sobre mí, respiro hondo. Sobre la la mesa del living coloco el álbum de fotos y la revista con el separador. Un post-it color rosa en forma de corazón que dice –Justin y _____ en parís- para indicar que ahí está la foto que nos tomo la señora en parís.
“Feliz Cumpleaños adelantado” digo con voz clara y serena.
“_______ yo no…” Dice en tono de incredulidad “Solo…gracias”
“No estaré aquí para esa fecha.” Era verdad.
“______, sé razonable, puedes venir, yo puedo ir” me reprende.
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L'art du meurtre et de l'amour
Fiksi PenggemarMi vida nunca fue sencilla, ni lo es, ni lo será, pero en el momento en que me pusieron esa misión, algo dentro de mi me dijo que mi vida iba a cambiar, no sé si para bien o para mal, pero al fin saldría de esta estúpida monotonía.