Milagro

capitulo 9

TIN
 
-¿Tin?- escucho que me dice y me alegro de escuchar su voz nuevamente
 
 -si yo- lo veo demacrado y más pálido que la última ves que nos vimos
 
-¿Qué haces aquí?-
 
-yo también me alegro de verte- le digo mientras giro los ojos
 
-eso no responde mi pregunta-
 
-vine a ver como estas, y veo que no estás bien ¿Por qué no has estado comiendo?-
 
-¿quién te dijo eso?-
 
-me lo dijo un pajarito, ya te conteste ahora dime tu ¿por que no has estado comiendo y te la has pasado encerrado y triste?-
 
-¿Por qué estás tan enterado de mi vida?-
 
-porque me importas, por que estaba preocupado por ti, por que te he extrañado y por que me gustas ¿necesitas otra razón?-
 
Niega y me abraza sonriendo, me sorprendo por eso, jamás me habría esperado que el hiciera eso.
Cuando salgo de mi asombro yo también lo abrazo ¿está más delgado? Creo que debo alimentarlo mucho
 
-yo también te he extrañado- sonrió mientras lo aprieto contra mí –creo que fue un error decirte que no nos viéramos más-
 
-yo también creía que era un error pero quise darte un poco de tiempo- no es verdad, en realidad me estaba muriendo por buscarlo – ahora necesito que te levantes y te des un baño por que saldremos a cenar-
 
-prefiero quedarme a platicar contigo-
 
-nada de eso Can estas demasiado delgado y sé que no te has estado alimentando últimamente así que platicaremos mientras cenamos yno discutas-
 
-está bien puedes esperarme un momento- asiento y el corre al baño
 
Veo su habitación, no le había puesto atención al entrar, es algo pequeña y tiene algunos posters de bandas y tiene videojuegos y algunas figuras de anime, parece la habitación de un niño, es muy el estilo de Can
 
Sigo observando la habitación hasta que noto varios frascos de medicamentos encima del mueble de la cama que no había notado ¿Can estará enfermo? Estoy por tomar uno pero en eso sale del baño con una toalla enredada en la cintura así quedo congelado viéndolo y siento un problema en mi entrepierna y Can lo nota por que baja la vista directamente a ese lugar
 
-hemm… puedes salir mientras me cambio-
 
Me pongo más rojo que un tomate, asiento y salgo de su habitación a toda velocidad ¿Qué fue eso? Nunca me había pasado eso, ¡qué vergüenza¡  ni con mi ex novia me había sentido así.
 
Al poco tiempo veo que va bajando las escaleras y me pregunto ¿Cómo puede verse tan lindo? Luego recuerdo que es Can y entonces entiendo que él ya es lindo sin importar que ropa use
 
-estoy listo-
 
-perdón por lo que paso hace un momento- siento mi rostro arder
 
-está bien, de hecho yo también me siento así contigo- no me sorprendas así¡¡¡ podría saltar sobre ti
 
-es mejor que nos vayamos o te voy a atacar-
 
-no me importaría- dice sonriendo
 
-maldición ¿Quién eres y donde dejaste a mi Can?-
 
-¿tu Can?-
 
-si por que desde este momento eres mío así que, ¿serias mi novio? Y no acepto un no por respuesta- se lanza sobre mis brazos mientras me besa
 
-¿eso es un sí?-
 
-dijiste que no aceptarías un no por respuesta- sonrió y lo vuelvo a besar
 
CAN
 
Después de alejarme una semana completa de Tin mi vida se volvió tan aburrida, como si ya no tuviera sentido nada ¿de qué me sirve saber que me voy a morir en unos meses si no los voy a vivir como quiero? Es cierto que el sufrirá cuando me haya ido pero quien no quiere vivir sus últimos días felices, así que quiero ser egoísta solo por una vez en mi vida.
 
Tin me pidió ser su novio y acepte, no podía estar más feliz por su propuesta yo lo deseaba verdaderamente, a partir de ese día no iba a detenerme de hacer nada de lo que quisiera, haría todas las locuras que pasaran por mi mente.
 
ese día salimos a cenar, estuvimos fuera hasta muy tarde así que al llegar a mi casa mis padres aun me estaban esperando despiertos  así que tuve que hablarles de Tin y de que ya éramos novios, se alegraron de que por fin había salido de mi habitación y de que me veía más animado, ellos ya sabían que era gay así que eso no los sorprendió pero estaban un poco preocupados de que no conocían a Tin así que tuve que tranquilizarlos diciéndoles que hacía casi un mes que salíamos para conocernos, omitiendo claro que apenas hace un mes que lo conozco.
 
Cuando todo el asunto de mi noviazgo quedo aclarado Tin se despidió y se fue a su casa mientras yo me fui a mi habitación, estaba por acostarme cuando escuche que tocaron la puerta
 
-hijo ¿ya te dormiste?-
 
-no madre ¿Qué pasa?-
 
-estoy algo preocupada-
 
-ya se los dije él no es mala persona-
 
-justo por eso hijo, ¿ya le contaste tu enfermedad? ¿Sabe que pasas mucho tiempo en el hospital? ¿Sabe que no debe darte disgustos?-
 
-no madre, no se lo he dicho- bajo la vista con tristeza
 
-por eso estoy preocupada ¿Qué pasara cuando él se entere? Qué tal si no le gusta-
 
-madre por favor no le digas nada, quiero disfrutar de nuestro noviazgo un poco antes de que él se aleje de mí-
 
-pero será peor para ti que se encariñen más y después venga la separación, entiéndelo hijo solo me importas tú y estoy preocupada por tu salud-
 
-solo dame algo de tiempo y hablare con el sobre lo que pasa conmigo-
 
-está bien hijo-
 
-solo te pido que si tienen que llevarme al hospital y no puedo avisarle, le digan que estoy fuera visitando a alguien y que no hay señal o cualquier cosa que se les ocurra-
 
-pero Can...-
 
-por favor madre, hablare con el cuándo sea el momento-
 
-Está bien hijo- me abraza mientras me da un beso en la mejilla –descansa-
 
Espero que no se entere hasta que sea mi momento de partir, no quiero que él me trate con lastima, podría soportar que los demás me traten con cuidado o que me tengan lastima pero el no.