Una familia extraña en Konoha

Capitulo 2

Temprano por la mañana Menma se despertó de su cama nueva, con un bostezo se dirigió a su baño donde se dio una ducha y se cambió con un pantalón negro, tenis blancos, camisa blanca y un suéter negro.

Salió del baño secando su cabello azabache con su mechón rubio, su cabello había crecido y ahora tenía el cabello como lo tenía Sasuke a su edad, le puso comida a Kira en su plato, dicha gata salió de debajo de la cama ante el sonido de la bolsa siendo agitada.

Salió de su habitación y bajo las escaleras en dirección a la cocina donde observó a sus padres besarse, no le dio importancia y se sentó en la mesa donde ya estaba servido el desayuno. Naruto y Sasuke salieron de su burbuja cuando escucharon los utensilios siendo utilizados, miraron a Menma que se encontraba tranquilamente comiendo, parpadearon dos veces y se sentaron junto a él

—buenos días Menma

—buenos días

Dijeron comenzando a comer pero entonces

—no vallas a causar problemas!

Dijo Naruto y casi Sasuke se hecha a reír, casi

—de verdad acabas de decir tú eso dobe?

Habló con diversión y Naruto hizo un puchero

—cállate teme!

Gruño ante la cara burlona de su esposo, Menma se rio bajito para no atraer el enojo de su padre rubio

—ya termine, me voy

Ante esto los adultos se voltearon automáticamente hacia el

—te acompañamos!

Casi cantaron devorando el desayuno como si no hubiera un mañana.

Menma en ese momento sintió el verdadero terror al ser acompañado por sus padres que iban diciendo muchas cosas sin inmutarse de lo avergonzado que estaba el niño por lo que decían

—y recuerda Menma, si quieres ir al baño solo dilo, no te esperes sino escapa por la ventana, eso lo hice un par de veces

Habló sonriente Naruto, Kira maulló llamando su atención

—puedo llevar a Kira?

—claro que puedes, si los Inuzukas llevan perros que son un escándalo porque tú no llevar un gato que solo duerme y come?

Dijo Sasuke divertido recibiendo un golpe en el hombro por parte de su esposo.

Llegaron a la academia que se encontraba llena de padres y niños que entrarían ese año, entre ellos encontraron a sus amigos que tenían a sus hijos junto a ellos

—chicos!

Grito Naruto agitando su mano alocadamente mientras salía disparado a su dirección, ambos azabaches los siguieron caminando con tranquilidad

—Naruto?!

El nombrado llegó junto a ellos con una gran sonrisa

—hola! Que bueno volverlos a ver!... quienes son ellos?

Pregunto agachándose a la altura de los pequeños niños que se encontraban tras las piernas de sus padres

—él es Inoichi

Presentó la Yamanaka a un pequeño Niño de piel pálida, ojos azules y cabello rubio como los de su madre

—Shikadai

—Chouchou

Presentaron Shikamaru y Chouji, eran una copia exacta de ambos a su edad con la excepción de que Chouchou era en versión niña

—él es Kiba junior... na mentira es Katsu

Dijo el Inuzuka con una sonrisa mostrando a un niño de cabello café oscuro con ojos blancos en señal del biakugan en ellos, a su lado un pequeño perro color café ladraba en dirección a Menma donde Kira se crispó y un bufido salió de su garganta gatuna

—ella es Sayuri, es hija de Sakura pero ella está en una misión por lo que no pudo venir

Dijo Hinata mostrando a una pequeña niña de cabello rosado y ojos verdes, una mini copia de Sakura, Naruto sonrió y de un tirón atrajo a Menma pasando un brazo por sus hombros

—él es mi hijo Menma, si tienen alguna duda y no pueden hablar con su profesor vallan con el

Dijo alegremente recibiendo una mirada de horror por parte del nombrado, el no quería tratar con niños, no sabía como actuar con ellos, tenía el presentimiento de que los podría deja llorando con solo una mirada suya, claro, sin querer

—p-pero...

—nada de peros

Sonrió dulcemente Naruto haciendo que cerrara la boca de golpe.

Kakashi apareció en un pequeño escenario elevado dando un discurso para los que acaban de entrar, cuando terminó los padres se despidieron de sus hijos dejando que entraran al edificio, Naruto beso la mejilla de Menma

—que te valla bien Menma, y ten cuidado con lo qué haces, no muestres tu sharingan

Susurró Sasuke a su oído antes de golpear su frente con dos dedos

—no los humilles tanto!

Grito el rubio mirando a su cachorro escurrirse entre la gente para entrar, las personas a su alrededor los miraron por un segundo murmurando entre ellos, Naruto aspiro aire

—viejos tiempos no?

Dijo alegremente y Sasuke asintió, tomó la mano de su esposo saliendo del lugar junto con sus amigos.

Menma tocó la puerta de su salón tranquilamente aunque por dentro si se encontraba un poco nervioso, siempre estaba siendo acompañado por sus padres o incluso Kurama, era una sorpresa que nadie estuviera vigilándolo, incluso si ninguno podía tenía cientos de clones de sus padres, pensó por mucho tiempo que estaban siendo paranoicos hasta que le explicaron el porqué de su actuar, al ser su hijo único con los linajes Uchiha, Uzumaki e incluso Namikaze por parte de su abuelo el cuarto Hokague, con esa pequeña explicación comprendió y más aún por el resto de su historia.

La puerta fue abierta revelando a un chunin de cabello castaño, ojos negros y una cicatriz en la nariz, este sonrió brillante

—hola Menma!

Saludo revolviendo el cabello del niño el cual sonrió un poco, había conocido al chunin en la boda de sus padres

—hola Iruka-sensei

Saludo y este lo dejó pasar ya conociendo de ante mano su situación. Ya adentro del salón Iruka llamo la atención de los jóvenes

—chicos tendremos un compañero nuevo este año, él estudio con sus padres y pasará el último año aquí

Dijo y las quejas comenzaron a escucharse por todos lados

—no es justo

—si, nosotros pasamos todos los años aquí, por que él tiene un trato especial?

Dijeron unos niños que fueron rápidamente callados por un Iruka enojado

—cállense!... Menma preséntate

Dijo y el nombrado estuvo tentado de saltar por la ventana, Kira maulló calmando sus pensamientos

—me llamo Menma Uchiha-Uzumaki un gusto

Dijo el niño dejando sin aliento a sus compañeros que comenzaron a murmurar en voz baja debido a esos apellidos, que eran una leyenda entre los ninjas y más los jóvenes que no habían tenido la oportunidad de conocer a los héroes de guerra, eso era entre los hombres, las mujeres eran otra cosa... demasiados chillidos para los pobres sentidos mejorados del pelinegro

—bien Menma, ve a sentarte

Llamo Iruka y muchos se hicieron a un lado para que se sentara junto a ellos, otros ponían cosas para que no se sentara, al final se sentó al fondo en una banca vacía que fue rápidamente invadida por sus compañeros curiosos, con un semblante frío prosiguió a ignorarlos a todos con sus ojos azul eléctrico enfocados al frente.