Capítulo 5

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Los últimos seis meses desaparecieron en un instante. Por primera vez en lo que pareció toda una vida, Anna no tenía nada de qué preocuparse. No más exámenes, no más asignaciones, no más ensayos sobre su perspectiva y si se había ampliado o no… y lo más importante, no más servidumbre. Lucy, Lee y Grace le agradaban mucho, pero no tener que cocinar y limpiar para ellas iba a ser un cambio agradable.

Todo lo que quedó para el año fue la conferencia final de su última clase. Por lo que pudo decir, fue una clase fácil de tomar, un reflejo holístico del año pasado y cómo habían cambiado sus puntos de vista del mundo. Ella podía hacer eso, pero no antes de conseguir su apariencia perfecta. Para celebrar su gran año, había invertido en un nuevo guardarropa. La mujer que miraba hacia atrás desde el espejo se veía hermosa, vestida con una hermosa blusa y una linda falda con volantes que mostraba sus piernas. Incluso se había aplicado un poco de maquillaje para darse un poco de color.

Se pasó las manos por el cuerpo. Su cuerpo estaba más regordete ahora que hace un año, no se podía negar eso, pero no se había dejado ir tan mal. Además, sus pechos estaban fuera de este mundo y, decidió mientras daba un rápido giro, valían la panza y los muslos gruesos que venían con ellos. Siempre se había sentido sosa, físicamente, pero ahora parecía una mujer de verdad.

Las demás la esperaban en la sala. Tanto Phoebe como June se veían hermosas con sus nuevos vestidos, incluso si el colosal trasero de June obligaba al suyo a subir sobre sus muslos. Ambos estaban visiblemente emocionados. "Vaya, Anna, te ves increíble", dijo Phoebe. "¡Esa falda es tan linda!"

"Gracias", respondió, haciendo una pose rápida. "Compré una falda como esta una semana antes de comenzar la universidad, pero he ganado un poco de peso desde entonces".

June sonrió. "¿Un poco de peso?"

"Seguro." Anna se encogió de hombros. “Creo que he puesto algo gordita, pero me pesé esta mañana y solo peso 302 libras."

Se dio cuenta de que June y Phoebe intercambiaron una sonrisa. Como habían anunciado en voz alta y con orgullo esa mañana, cada uno pesaba 363 libras. Fue una cantidad impresionante de aumento de peso y Anna estaba feliz por ellos, supuso, pero estaba más feliz de no ser tan grande como ellas.

"No puedo creer que ya te estés graduando de Ampliando tu perspectiva", dijo Lucy mientras Anna se inclinaba para un abrazo. Fue una maniobra incómoda, ya que el vientre de Lucy se abultaba hacia adelante, colgando pesadamente entre sus piernas. "Mi niña ya ha crecido". Lucy pesaba alrededor de 571 libras, su cuerpo estaba cubierto de gruesas capas de grasa suave y cálida. Anna sintió que se hundía en el cuerpo de la chica más grande.

Fue a abrazar a Lee pero se conformó con apretar cada uno de sus pechos titánicos. Con un peso máximo de 657 libras, Anna sabía que no tenía esperanzas de abrazarla. “Ahora recuerda, de una diosa tetona a otra, siempre estoy aquí si necesitas ayuda o consejo. O mis sostenes viejos, si sigues superando el tuyo ". Anna se rió y la besó en la mejilla.

"Voy a extrañar tenerte como mi esclava", dijo Grace desde la alfombra. Estaba sentada en el suelo en un charco de su propia carne, sus muslos se extendían en todas direcciones, más suaves y más cómodos que cualquier almohada. Lo cual fue una suerte en cierto modo, ya que tuvo que renunciar a su sofá cuando se volvió demasiado grande para caber en él. Incluso había empezado a dormir aquí, su diminuta cama crujía peligrosamente bajo su cuerpo de 709 libras. "Ya estoy suspirando por tus muffins".

"Hay un lote en la cocina", respondió con una carcajada. Era gracioso: es posible que Grace ya extrañara a sus doncellas, pero Anna se dio cuenta de que iba a extrañar aún más cuidarlas. Eran mujeres increíbles y grandes amigas, siempre agradecidas por sus servicios.

Estaba libre, se dio cuenta mientras se enderezaba, ajustando su falda para cubrir su trasero flácido. Hace un año, realmente se había sentido como una sentencia de prisión. Ahora, sin embargo, mientras miraba a Phoebe y June caminando hacia ella y mirando a las otras mujeres que apenas se movían, no pudo evitar pensar en la letra de alguna canción vieja ...

Oh, los presos y los prisioneros
descubrí que eran mi tipo
Y fue allí dentro de los bares
donde encontré mi tranquilidad.

Ampliando Su Perspectiva-GlotoneriaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora