Final

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Disculpen las faltas de ortografía que se pudieron llegar escapar.













Los ojos pardos seguían la sensual figura de ese precioso omega tricolor, el respaldo de un caballito de cristal descansaba en sus labios gruesos, la comisura de estos se elevó en una suave sonrisa, su amado regañaba a uno de sus hijos al ver como esté molestaba a uno de los más pequeños.


Tan embonado se encontraba que en ningún momento se percato de que la silla a su lado, era arrastrada hacia atrás por la presencia de otro alfa, si estuviera consciente de su alrededor quizás se habría tensado por que otro alfa estaba muy cerca de su presencia, pero realmente se encontraba relajado, disfrutando del ambiente alegre como lleno de fiesta. Las risas, carcajadas alegres, así como los gritos de jubilo era algo nuevo, porque eso era algo sumamente surrealista, pues del lugar de donde el provenía las celebraciones eran más sobrias y estas para la hora terminaban, por el contrario, aquí no se le veía final a la celebración.


-Eres un alfa con mucha suerte.


La voz grave a su costado lo saco de su ensoñación, carraspeo incomodo por tan abrupta interrupción, que fue necesario recurrir a ese porte serio pero elegante, su actitud de representante de su país.


-No creí verte por aquí, Rusia.


El nombrado sonrío, una sonrisa para nada alegre, ni siquiera triste...era una sonrisa más bien resignada.


-No tenía intención alguna en asistir...di por sentado que no sería invitado a la celebración, pero heme aquí.


-Si, él es así.


Un silenció por demás incomodo los abrumo, quizás en otro tiempo llegaron a ser muy buenos amigos, pero la necedad de el alfa ruso, fue lo que provoco esta distancia.


¿Cómo volver a ser amigos?


Alemania ni siquiera estaba seguro de querer retomar su amistad con el ex soviético, y no por celos, ni mucho menos solo que su alfa no estaba cómodo con la idea de tener al ex marido de su omega cerca de él, más cuando esté a dejado en claro que aún tiene sentimientos románticos por el tricolor mexicano.


Por otro lado Rusia se encontraba en la misma situación, solo que el realmente deseaba recuperar su amistad con su viejo mejor amigo, porque si era sincero consigo mismo a echado de menos a Alemania. Entendía y no iba a mentir con el hecho de que realmente su alfa se moría de celos al ver a México en los brazos de Alemania, ver lo amorosos que eran él uno con él otro. Luchaba constantemente con su parte animal para que este no tomara el control y así evitar saltarle a la yugular al alemán.

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