••Cita••

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Narradora:

Ya listo para la cita en el café, se miró en el espejo apreciando su reflejo.

Fangarroneó un poco para luego marcharse rumbo al establecimiento que habían acordado unos minutos antes.

Al llegar se sentó en una pequeña mesa de madera para 2 a esperar a Paloma.

Espero al rededor de 30 minutos sentado allí cuando al fin vió la silueta que tanto esperaba.

- ¡Preciosa, aquí!- gritó saludando y captando su atención.

- Hola Nick

- ¿Como estás? -Dijo alegre por la llegada de su amante.

- Bien, he estado viendo algunas casas, ¿y tú? ¿ya le has dejado claras las cosas a Mónica?- dijo llamando a un camarero para pedir 2 cafés y unas cosas que comer.

- emm sí - hablo bajo algo apenado

- Uff no veo la hora de tenerte para mí solita

- Mónica no te merece, que suerte que te hice abrir los ojos.

- No soporto la idea de tener que compartirte con esa zorra - rió un poco tomando un sorbo de su café

- ¡no la llames así!, no te ha hecho nada - levantó la voz al escuchar las palabras denigrantes que salían de la de pelo castaño.

- ¡¿PORQUÉ?! ACASO LA PREFIERES, ¿NO QUIERES IRTE CON ELLA MEJOR? - Gritó armando un escándalo ocasionando que todos en el local los mirasen.

- no te pongas así mi amor

- ¡¿COMO QUIERES QUE ME PONGA SI PREFIERES A ESA ESTUPIDA, ANTES QUE A MI?!
DIME, ¡¿LA PREFIERES?!

- no, solo es que.. emm, No, obviamente te prefiero a tí cariño - se resigno a no pelear al notar las intensas miradas de todos

- Más te vale...

El castaño solo la miró con miedo

- ¡Mira! Te mostraré un par de casas que encontré, te encantaran

La chica pasaría los próximos 40  minutos, mostrandolé casas gigantes y hermosas pero con precios más altos que cualquier salario o presupuesto que podría tener.

- Emm, no te parece que, tal vez, sean un poco caras?, lo siento amor pero no creo que podamos permitirnos esto

- arg como sea, veremos otras de todas maneras- dijo de malagana la mujer.

Pasaron el rato charlando de diferentes temas, la mayoría comunes y trivales, nada de que perderse siendo sinceros.

Al ella apenas terminar le dió un beso a Nick en la mejilla y se levantó para irse.

- ¡Adióóós! ¡te quieroo! - Le dijo haciendo un corazón con las manos para luego irse

El hombre solo pudo saludar débil con la mano ante este acto.

Para algunos, un simple gesto
Para él, una llave que abría una pequeña puerta en su cabeza, una puerta que dejaba ver recuerdos de su ex esposa haciendo ese tan característico gesto suyo.

Holas, este capítulo no me gustó mucho :<, pero tenía ganas de escribir, sinceramente hoy fue un día de mierda y estoy cansada pero me entretuve un rato con esto uwu

━• 5 𝑎𝑛̃𝑜𝑠 𝑒𝑛 𝑢𝑛𝑎 𝑐𝑎𝑟𝑡𝑎 •━Donde viven las historias. Descúbrelo ahora