Quedan 2 días para el gran día. Mi famoso y esperado por todos, menos por mi, fiesta de cumpleaños.
Después de hablar con Emily esa noche, y de aconsejar a Liam y el a mi. No logre llegar a una conclusión razonable de porque Emily actuaba así. Ha pasado 2 semanas desde la ultima vez que vi al misteriosos hombre. Supongo que de verdad era una broma, pero no tiene ni patas ni cabeza pues ya se que ni Max, ni Trevor la hicieron, y son los únicos que se me ocurren que podrían tomarse el atrevimiento, y los únicos que saben que no los mataría brutalmente.
No tengo muchas ganas de ir al instituto hoy. Así como han transcurrido los días sin que deje de pensar en ese chico misterioso, han pasado las noches viendo su figura observándome, siempre desde lejos. Casi espero que aparezca en cualquier parte y algo aun mas extraño es que no dejo de sentirme observada y seguida por alguien. Esa tal vez sea la razón de que sea tan difícil olvidar a ese chico.
Desde el centro comercial tengo la misma sensación. a veces desaparece, otras veces parece no irse nunca.
-¡Jay! ¡Llegaras tarde! -grita mi madre desde alguna parte de la casa.
Decido, al menos por un día, olvidarme de todo eso y hacer caso omiso de sentirme observada. Han transcurrido dos semanas y nada, y solo lo he visto 2 veces, lo del centro comercial debió haber sido secuela del miedo y mi gran imaginación para cosas imposibles, solo debo ignorarlo y pronto olvidare todo el asunto por completo.
-¡Jay! -grita mi hermano desde afuera de la habitación.
-Vale vale ya me muevo -digo mientras tomo mi bolso.
Bajo las escaleras con mi hermano, tomamos el desayuno, nos despedimos de mama y nos montamos en el auto. Llegamos al instituto con 10 minutos de adelanto.
-Hey, suerte -dice mi hermano mientras se aleja con su grupo de amigos dejándome sola.
Genial, y no veo señales de Emily. Algunos compañeros me saludan mientras camino por el estacionamiento hacia las puertas. Decido llamarla ya que faltan menos de 5 minutos para que cierren las puertas pero al sacar mi móvil resbala de mis manos directo al suelo, pero alguien lo sostiene justo a tiempo.
-Dios, gracias, hubiera sido chatarra si... -y entonces lo veo.
No puede ser, es el, el chico, el del parque Dylan y el que estuvo en el patio de mi casa hace 2 semanas, se que es el. Es alto de pelo negro un poco desordenado y ojos negros.
-No hay de que -responde.
Estoy atónita y mi primer instinto es correr, así que cuando me doy vuelta no para exactamente correr pero si alejarme bastante lejos de el, me encuentro con Emily.
-Hey, ya conociste a mi primo -dice mientras el viento agita su pelo rubio que le llega a los hombros.
-¿Tu primo? -respondo confundida.
-Si, soy Jeremy -dice una voz detrás de mi.
No quiero voltear pero lo hago. Si, definitivamente es mucho mas alto de lo que me fije la primera vez, pero no es que yo sea muy alta tampoco por lo que todo me parece muy alto. Lleva una camisa negra, con jeans, botas y una mochila colgada al hombro. Me quedo mirándolo. Debe ser el, el chico del parque y del jardín trasero, bueno nunca lo vi bien en las dos ocasiones, pero algo me decía que es así.
-¿Jay? ¿Jay? -llama Emily, sacándome de mis pensamientos. -¿Estas bien?
La miro. Si este es el chico debo controlarme. Emily no me mentiría así que supongo que si es su primo. Pero la coincidencia es tan extraña.
-Si, estoy bien -digo mientras pienso que hablare luego con Emily pero probablemente me dirá que es imposible, que el no me conoce y mucho menos sabría mi dirección. Espera, claro que me diría eso porque es imposible que el sea el mismo chico, solo estoy paranoica por lo de sentirme vigilada y eso. Seguro que ese tipo del parque es solo un enfermo mental, pensamiento que no me reconforta, en cambio, Jeremy, el primo de Emily parece un chico completamente normal, si no fuera que parece un modelo sacado de revista. Demonios, es guapísimo. Y yo aquí actuando como boba.
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Fatum (Destino) | [Pausada temporalmente]
Science FictionEl mundo de Jayla da un giro totalmente inesperado. Nada es lo que parece, y esto lo averiguara de primera mano. Lo que creía normal, lo que creía perdido, la realidad a la que estaba acostumbrada, incluso lo que pensaba que tenia... Nada de eso imp...