❝𝐒𝐓𝐑𝐀𝐖𝐁𝐄𝐑𝐑𝐘 𝐒𝐌𝐎𝐊𝐄❞ ─ seulrene [FINALIZADA]

🍓𝖆𝖑𝖜𝖆𝖞𝖘 𝖙𝖆𝖘𝖙𝖊 𝖑𝖎𝖐𝖊 𝖞𝖔𝖚🚬

𝗘𝗽𝗶́𝗹𝗼𝗴𝗼/𝗢𝘂𝘁𝗿𝗼

El cabello de la pelinegra golpea su propia cara por culpa de la fría brisa matutina, se siente como un aviso del invierno pronto a llegar. Se siente justo como aquella vez que probó unos labios que no puede olvidar.

No le sorprende que las calles del vecindario estén tan vacías, es lunes y el afortunado clima ha de servir como excusa para muchos faltar al trabajo o a la escuela. Pero ella no puede darse ese lujo, sin embargo, va temprano, eso le da oportunidad de aprovechar esas antiguas memorias.

Pasa por la cancha que fue testigo de un acto noble de amor, por aquellas calles que las vieron caminar en distintas direcciones a un mismo lugar. Pasa por la casa de los Kang que ha estado abandonada desde que las hijas desaparecieron y el señor fue arrestado; la casa nunca fue puesta en venta y en los seis meses que han pasado desde entonces nadie la ha reclamado. Nadie quiere vivir allí.

Aprieta sus manos dentro de los bolsillos de su pantalón chocando sus nudillos contra el encendedor rosa que reposa allí dentro. Sentir el frío del metal logra calmar un poco esa llamarada de enojo que la sombra de aquellos oscuros días enciende en ella cada vez que un ligero pensamiento al respecto la abarca.

Perdió tanto como ganó de esa situación; vicios nuevos llegaron y otros se fueron, manos solitarias buscando calor consiguieron otras palmas a las cuales amoldarse. La nicotina no volvió a aparecer entre dulces de fresa.

No tiene tiempo para esas cosas, tiene un lugar al que llegar.

Acomoda su cabello en una coleta alta cansada de tener que apartarlo de su cara, ha crecido mucho desde la última vez que decidió cortarlo; pero está bien a ella le gusta así.

La mirada de todo el curso que acaba de comenzar clases recae sobre ella, desde los nuevo ingreso hasta el rostro que cree reconocer de años anteriores.

Cómo en los viejos tiempos.

Es patético que sigan sorprendiendo al verla, sabe que es hermosa pero los demás no tienen que actuar como si fuera la primera vez que vieran a alguien así. Por qué definitivamente no lo es.

Alguien mucho más hermosa que ella está cerca de los casilleros; camisa blanca y pantalones negros ajustados, toda una maravilla para sus ojos si no fuera por el idiota que la mira como una fiera a su presa; lamentablemente, en esta pirámide jerárquica él es la presa de alguien más.

ㅡTe le quitas de encima o te quito de encima.

Una corriente pasa por la espalda del chico al esa voz retumbar en su oído izquierdo, pánico creciendo por su expresión mientras una sonrisa crece en otro rostro.

ㅡN-noona, lo lamento. ㅡlos quejidos del pelinaranja que levanta sus manos en señal de paz son música para sus oídos, aunque todo sea una fachada también tiene su lado divertido de haber adoptado esta actitud ajena. ㅡPor favor no me lastime.

ㅡLargo de aquí, Jaehyun.

El chico todavía con sus manos alzadas se aleja de ella, llenando el pasillo de burlas entre labios e iniciado ese acostumbrado ritual de esparcir rumores. No puede esperar a cuál será el de esta semana. Sin embargo, un par de brazo serpenteando por su cintura la sacan de ese estado de satisfacción por haberse deshecho de quién se atrevía a intentar tomar lo que es suyo.

ㅡAhora asustaste a Jae, ¿Era necesario, Seullie-boo?

Seulgi sonríe ante el antiguo sobrenombre, Joohyun puede lucir y ser mucho más madura ahora pero seguirá siendo la pequeña de la mayor; quien toma su rostro y planta un suave beso sobre sus labios. Dulce, como fresas.