ELIZABETH... [Melizabeth] [Editado✔]

Capitulo XX

Melissa caminaba por el jardín, ya había sido el funeral de su abuela. Se sentó en la banca que había delante de la pequeña laguna que tenían en el jardín del palacio y miro a los peces que nadaban en el agua.

-Cariño, ¿cómo te encuentras?-escucho la voz de su padre.

A levantar la vista vio a su padre enfrente de ella, era un hombre apuesto de un poco más de cuarenta años con cabellos plateados largos y ojos de distintos colores, uno verde como tenía su abuelo y uno azul como tenía su abuela, tenía la misma peculiaridad que su abuela tenía en los ojos.

-Estoy bien pero triste, no quería que la abuela nos dejara aún.-dijo esta y su padre se sentó a su lado.

-Bueno pero piensa que en este momento estará con el abuelo, ella lo extraño mucho en los últimos años.-

-¿En serio?-

Su padre asintió.

-Por cierto, tu abuelo Zeldris encontró esto en las cosas de tu abuela es para ti.-dijo su padre dándole un diario.

Melissa lo tomo y lo abrió. Había una carta en la primera página.

-¡Tristán!-escucharon.

Melissa vio a su tío Elías acercarse a ellos a pesar de tener unas pequeñas canas en sus cabellos ondulados no perdía su encanto.

-El tío Estarossa pide ayuda con los demás niños, Tía Gelda y Elaine están acompañando a Merlín y Tío Zeldris con Ban y Arthur están ordenando los últimos detalles.-

-Debo encargarme, si necesitas hablar con alguien tu madre esta con tus hermanos.-

-No se preocupen, estaré bien.-dijo Melissa, ella era la menor de los tres hijos de Tristán y la única en ser niña.

-Si no quieres estar sola puedes ir tus tías, están sirviendo té junto con tus primos.-dijo Elías.

-Perdón tío Eli, pero no estoy de humor para estar con Gustav y Jericho.-

-Lo entiendo, no entienden mucho lo que está ocurriendo así que ellos siguen como si nada.-dijo este.

Los hijos menores de Elías tenían seis años por lo cual no entendían mucho la situación aparte de que nadie les quería explicar al ser muy pequeños.

Tristán y Elías se retiraron, y ella se dispuso a leer el diario.

Querida Melissa:

Si estás leyendo esto es porque yo ya no estoy aquí y tal vez no pude terminar de contarte la historia o tal vez si en todo caso te dejo este diario en donde escribí la historia que te estaba relatando, nunca te lo dije pero esta es la historia mía y de tu abuelo. Podras leerla todas las veces que quieras y podas sentir que estoy contigo y te pueda ayudar en algunos momentos de tu vida cuando encuentras a esa persona amada también comparte esta historia con tus hermanos y primos, estos últimos cuando sean más grandes.

Siempre los amare a todos.

Sonrió al leer la carta y busco la parte hasta donde su abuela le había contado. Al encontrarla se dispuso a terminar de leer la historia.

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El ultimo día en Liones había pasado sin problemas, Meliodas se había vuelto a reunir con Bartra para detallar algunos arreglos en la relación Demon-Liones al igual que algunas otras cosas, todo salió bien y Bartra estaba orgulloso del buen gobernante que se había convertido el príncipe mayor de Demon.