Demasiado Orgullo (Abandonada)

Capítulo 3

Cuando por fín estaba por salir de el aula Raquel interrumpe nuestra caminata haciéndome tropezar y caer al suelo en un golpe seco.
Tras recuperarme del golpe la miró algo confundida dándome cuenta de sus intenciones. Está, rápidamente, sube las escaleras como alma que persigue el diablo dejándome a mi sola con Matt, el cuál era encargado de sellar el aula y debía ser el último en abandonarla.

Rápidamente al advertir en mi presencia, se me queda mirando detenidamente con diversión en el rostro y sin mover un solo dedo para prestar una mínima ayuda.

- ¿No piensas...yo que sé, ayudarme o algo?- le reprimo fastidiada por el show que estoy montando.

- Yo creo que te ves muy bien ahí en el suelo, sé te ve......vulnerable- suelta pensativo reprimiendo una risa.

Ya cabreada con el insulso oponente que tengo me levanto bruscamente para poder encararlo.

- Tampoco creo que un zoquete como tú hubiera podido hacer algo más que quedarse mirando al infinito sin un atisbo de pensamiento- le digo desafiante.

- Estaba haciendo una lista de todos los fallos que tienes, pero era tan larga que no me ha dado tiempo a terminar en todo este rato - contraataca dando un paso al frente.

Doy otro paso hacia el apunto de dar mi último ataque y tener la última palabra en esta guerra, pero en ese instante un chirríante sonido me saca de mis pensamientos haciendo que Matt y yo desconectamos nuestras miradas.

- Si tenéis pensado besaros procurad cerrar la puerta - dice mi amiga apoyada en el marco de la puerta - tortolitos, la profesora os tiene en busca y captura. Pero si prefereís le digo que estabais ocupados teniendo un momento romántico en el aula.

Salgo de mi pequeño trance debido a la sorpresa enterándome que esta vez no estoy yo sola escuchando las palabras delirantes de Raquel.

- No estábamos besándonos, de acuerdo - digo hacercadome a ella para explicarle, dándome cuenta que ni yo misma lo tenía claro.

- Quieres verme la cara de estúpida, tengo la seguridad de que aquí estaba pasado algo y si tú no me lo dices será Matt el que responda, y ambas sabemos que mentir no es su don - susurra amenazante en mi oído.

Mis ojos se abren rápidamente ante la impresión sobre su comentario - Matt, ¿Tu no se supone que deberías estar de mi parte? Ven y ayudame con esto- le pido para poder explicarle también el significado de las estúpidas y delirantes palabras de mi compañera y restaurar nuestras discusiones sin pensamientos de alguna relación.

- Tu no me mandas- suelta tan tozudo con siempre.
Desesperada pongo los ojos en blanco si y voy yo misma ha conseguir su colaboración, cojo su mano bruscamente consiguiendo que por fin colaboré a regañadientes.

- Con que también os dais la mano, ¿Estáis seguros de que no estabais apunto de...ya sabéis? - suelta haciendo que nosotros colorados de la vergüenza nos paremos soltado nuestras manos.

Se da la vuelta y se dirige a la puerta para subir no sin antes girarse y mirarnos.

- La profe os busca - dice subiendo con una sonrisa triunfante en el rostro.

Pasan algunos segundos donde un silencio sepulcral inunda la clase.

- Esto...- comienza Matt

- Ni una palabra, ¿entendido?- le interrumpo para no escuchar ninguna de las cosas que tenía pensado dirigirme- tu solo olvida toda esta conversación.

Me doy la vuelta preparada para escapar de toda esta bochornosa escena directa a la puerta.

- ¿Sabes que no voy a poder olvidarlo no?- dice cogiendome ahora el del brazo, asiento lentamente procurando evitar su mirada incómoda- ahora tira que tengo que terminar de pensar la lista de tus errores- dice sonriendo.

Risueña le devuelvo la sonrisa saliendo de la clase. Subo un par de escaleras chocando me repentinamente con la mano de Raquel, que al parecer había estado escuchando toda la conversación.
" Como no me he fijado, obviamente sus pasos se han detenido y no te has dado cuenta" me reprimo dandome una auto bofetada mental.

- Bueno...¿para qué día tengo que preparar la boda?- dice rodeándome con el brazo.

- No te estranguló porque eres mi mejor amiga, que lo sepas- le contesto mientras le miró fulminante.

- Sube vaga antes de que nos choquemos con tu media naranja, por cierto la profe dice que mañana llegará una nueva alumna y que debemos tratarla bien.

- Con lo antisociales que somos dudo que se entere siquiera de que estamos- digo mientras reímos sonoras ante el comentario.

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- Señoritas hay algo que quieran decirme respecto a vuestro...retraso, ¿y donde está el joven Johnson?

- Lo he visto a bajo antes supongo que ahora subirá - respondo incómoda por la situación anterior.

Salgo de la sala con la cabeza inundada de dudas y pensamientos contradictorios, al sentir la mirada de mis amigas clavadas sobre mi decido dejar todas esas dudas para otro momento y disfrutar de un descanso.

- ¿Por que habéis tardado tanto tú y Matt? La profe al ver que no llevabais ha decidido poneros juntos para el proyecto de historia- explica Queralt.

- Tía deja de sonreír como una tonta - oigo que me susurra mi amiga graciosa. Al darme cuenta de mi rostro rápidamente me sacudo confundida intentado volver a la realidad "¿Que me está pasando?".

-¿Delilah, estás bien?- pregunta Clara con un tono preocupado- no te has quejado siquiera de tu nuevo acompañante para el trabajo.

- S-Si, por supuesto solo estaba... reorganizando mi pensamientos.

- Bajamos- dicen levantándose y recibiendo sus pertenencias.

- ¿Ya?- digo extrañada mirando el reloj de mi compañera- qué rápido se me ha pasado.

- El tiempo pasa muy rápido cuando estás con el amor de tu vida- dice la Raquel con ese tono poético, que me hace reír por su falta de decoro hablando sobre el tema.

Las demás nos miran extrañadas y mi amiga se pone a reír mientras animadamente les explica lo ocurrido durante el descanso; yo por mi parte avergonzada me escabulló para poder escapar de los comentarios y preguntas que próximamente lloverán sobre mi.

Además, necesito tiempo para organizar los libros mentales que con la sonrisa de ese zoquete han acabado esparcidos por el suelo nublando mis pensamientos.