Título: Regalo de la abuela!
Pareja: Tamaki x MaleReader
⚠️Advertencia: Lemmon mal hecho :,v[Lector POV]
Hace poco mi abuelita me había regalado un híbrido lobo para que no me sienta solo, el problema es que el híbrido es un alfa aunque pensándolo bien no es un gran problema ya que es muy tímido, cuando le quiero decir un piropo tengo que avisarle porque ya me ha pasado que se desmaya con la cara roja.
-Tamaki...- se acercó el omega humano hacia su híbrido.
-S...si?
-Piropo?- pregunto con una gran sonrisa.
-Esta bien...
-Quien fuera sol, para darte todo el día- continuo al ver que no reaccionaba- Tamaki? Noooo! Te mate! Lo siento!!!- dijo mientras lloraba de manera dramática.
Después de eso cargue a Tamaki y lo acoste hacia su cama, la verdad me costo ya que como él era un alfa y yo un omega supongo que es obvio, pero bueno.
(...)
Había salido para comprar un poco de ingredientes para el almuerzo de hoy, como normalmente me pasaba los alfas me molestaban intentando "coquetear" conmigo, que desagradable, ellos intentaban restregarme su aroma. Ya había llegado al departamento y cuando ya estaba entrando (bueno no entrando como tal estaba abriendo la puerta), me lleno un aroma algo dulce, pero imponente, que me hizo temblar un poco.
-T...tamaki?- entre a mi hogar dejando las bolsas en la barra de la cocina, mientras me acercaba a su habitación.
Me paré de lleno por lo fuerte e imponente del olor que llego a mi nariz era... era algo como excitante, quede extasiado ante tan grandioso olor, entonces abrí la puerta de su habitación, no había nadie o eso creo. De repente me encontraba acorralado contra la pared de la habitación de Tamaki.
-T...tamaki?- el menor intentaba mantener su mente clara.
-Esos estupidos de nuevo, verdad?- dijo refiriéndose a el olor del menor, alguno que otro había conseguido impregnar un poco de su olor en mi- No me gusta que los demás alfas intenten algo contigo, a partir de ahora serás todo mío- dijo mientras tenía en su cara un sonrojo notable, entonces lo comprendí... había entrado en celo y era jodidamente sexy.
Después de eso Tamaki me empezó a besar de manera lujuriosa y apasionada la boca, cuello y otras partes de mi cuerpo mientras yo solo regalaba le suspiros y gemidos de placer, solo me dejaba hacer. Poco a poco nos fuimos despojando de nuestras prendas, ahora el mayor jugaba con mi entrada ya húmeda, en ese momento me encontraba perdido en mis instintos y le suplicaba por ser penetrado una de vez.
-Mételo ya...
-Alguien está ansioso- dijo burlándose un poco para luego penetrarlo de una vez sacándole un grito de placer al omega y un par de lagrimas por lo grande que era el miembro- estás bien?- el alfa no quería que el menor hiciera algo que el no quiera.
-S...si, podrías moverte?- pregunto con unas pocas lagrimas cubriendo su muy sonrojado rostro.
Esto le saco una sonrisa a mi alfa y se empezó a mover dentro de mi, primero de manera lenta para luego subir la velocidad de sus embestidas. Si mi abuela supiera lo que estoy haciendo el híbrido que me regaló para que no me sintiera solo, no quiero ni imaginar lo que pasaría, pero vaya que no me siento solo.
(...)
Supongo que ya lo suponían, pero hoy cuando me desperté no podía caminar, la verdad ayer no pensé en que esto podría pasar. Cuando me desperté tenía a un Tamaki dormido a mi costado que me abrazaba desde la cintura transmitiéndome su aroma y calor, se veía muy tierno, le di un pico rápido para despertarlo y regañarlo porque no podía caminar, Tamaki solo se sonrojó y se disculpo. Desde entonces siempre que está por llegar su celo me encuentro acostado con él en nuestra cama, bueno yo acostado en su regazo mientras él juega con mi cabello.