Ever since New York -Peraltiago AU

Capitulo 1

A sus doce años, mientras Amy vivía en un lujoso penthouse en Manhattan con sus padres, ellos le explicaron que conocería a su futuro esposo, el cual pertenecía al mismo entorno social en el que se desenvolvía. Ella, al ser pequeña, solo asintió y esperó a que su futura pareja llegara.

A los minutos, llegaron los Wells, unos muy buenos amigos de sus padres, con su hijo menor Teddy, el cual tenía catorce. Los sentaron en el sillón de la sala y les explicaron.

-Cuando Amy cumpla dieciséis años-dijo Victor Santiago- empezaran su noviazgo, para que puedan conocerse de mejor manera-

- Y cuando ambos tengan veintiún años, se casarán y vivirán en la casa que ambas familias compramos- concluyó Anna Wells.

Amy miró a Teddy y le sonrío, este la miró con aires de superioridad y alejó la vista. Ella se sintió frustrada, ya que todos los niños, incluido Teddy, la miraban de esa manera, logrando que su autoestima bajara y bajara, y que deseara que su cumpleaños numero veintiuno no llegara nunca.

Con el pasar de los años, Amy empezó a ver el lado positivo de la situación. Se dio cuenta que, bajo su punto de vista, este arreglo iba a ser la única forma de tener a alguien a su lado, debido a que nadie en su escuela la miraba con amor, a diferencia de como miraban al resto de sus compañeros y compañeras de clase. Cuando su cumpleaños dieciséis llegó, Teddy le llevó un regalo y le dijo:

-Tienes suerte de que nuestros padres hayan hecho este acuerdo, novia- lo que hizo que toda su positividad se fuera al suelo.

A pesar de la pésima primera impresión, a medida que su "romance" avanzaba, se dio cuenta que Teddy no era una mala persona, de hecho se había convertido en alguien muy cercano para ella, incluso, fingir su romance no implicaba mucha dificultad, ya que lo quería mucho y sabía que el la quería ella, pero Amy sentía que faltaba algo, porque cuando pensaba en él no sentía las mariposas en el estomago, o las ganas de sonreír al verlo, pero al final, el acuerdo ya no era del todo malo para ella, debido a que, por lo menos, pasaría su vida con una persona a la cual quería.