𝐃 ⸽ «Dragones» era lo primero
que llegaba a la mente de
las personas al escuchar
su nombre.
Respetada por muchos y
temida por otros; un aspecto
jovial que encanta a mucho.
Sus tatuajes es lo que...
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CHAPTER 3 CONNECTIONAND HOGWARTS
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A la mañana siguiente los del santuario se levantaron más temprano de lo que ellos mismos creerían, al parecer en su mayoría solo lo hacia para impresionar a su visitante pero eso no era lo que pensaba Charlie, el día anterior a ese Rhaena se lo dejo más que claro, no quería que la impresionaran, solo quería saber que tan en serio se tomaban su trabajo como dragonologistas y Charlie estaba más que dispuesto a demostrarle que tan enserio se tomaba su trabajo.
Aquella mañana, Charlie le tocó estar con los dragones adultos –los cuales son más difíciles de tratar que los bebé– así que se dirigió al área en especifica donde los dragones adultos se encontraban, y realmente estaba un poco mas lejos del santuario, y no cualquiera podría entrar, a menos si querrías una quemadura lo suficientemente grabe ó la misma muerte.
–¡Charlie! –grito uno de sus compañeros–. Que bueno que te apareces aquí –su compañero se acerco mas a él
–¿Sucede algo? –Charlie pregunto con un tono de preocupación
–Algo así –su compañero se rasco la nuca con su mano–. Ella esta aquí
–¿Dónde está? –le volvió a preguntar
–En aquella colina –hizo un ademán con la cabeza para que viera a espaldas de su compañero– llego aquí mucho antes que nosotros
Charlie volteo a mirar a donde Rhaena se encontraba, se veía muy diferente a cuando acaba de llegar. No tenía puesto un vestido que llegaba hasta sus pies y aquella capa, en cambio vestía con pantalones de cuero negro bastante ajustado a su cuerpo y usaba un corset victoriano negro sin tirantes y una capa gris plateada en su hombro derecho sujetada por una cadena de plata la cual parecía tener el aspecto de huesos y esa peculiar joya que adornaba del mismo lado de la capa, tres cabezas de dragón, traía puestas una botas de cuero con tacón de puente.
Charlie realmente se cautivo con su presencia, y a pesar de que ya la había visto en mas de una ocasión se pregunto que si solo por ser de la realeza el estilo siempre estaba presente en ella –y también en su familia–, no podría saberlo con seguridad porque en ese momento estaba anonado con la presencia de aquella mujer.
