Vemos a un Izuku de 13 años en el sótano de su casa, el cual había convertido en su propio laboratorio, y no era para menos, lo había construido a la medida para ser su lugar de trabajo, una de las ventajas de ser rico.
Izuku se encontraba lanzando shuriken a unos blancos que estaban a 6 metros de distancia.
Logró impactar 4 shuriken en el centro del blanco, mientras que los demás los impactó muy cerca del centro.
Izuku agarró más shuriken y se movió hacia otro lugar de tiro, pero este tenía blancos móviles, y estaban a 8 metros.
Izuku inhaló aire, concentrándose, y luego, lanzó los shuriken.
Lanzó en total 10, 3 impactaron en el centro del blanco, mientras que 4 impactaron muy cerca del centro, los 3 restantes no dieron en ningún blanco.
Izuku suspiró, todavía le faltaba práctica.
Recogió los shuriken que había lanzado y los guardó, luego cambió de lugar y entró a su 'laboratorio' en el sótano.
El sótano del peliverde se dividía en 9 partes.
La primera era un gimnasio donde practicaba técnicas de pelea y donde se ejercitaba.
La segunda era en donde tenía un campo de tiro junto a diversas cosas para entrenar su puntería, ya sea con shuriken, flechas o bombas.
La tercera era su laboratorio, donde el mismo creaba sus inventos, que si una pistola gancho, que si unos lentes de visión nocturna, e incluso, también había creado ciertas cosas que le ayudaban a su organismo, como una pastilla nutricional, la cual tenía todo los nutrientes que necesitaba y le daba la suficiente energía para todo el día, aunque claro, también le gustaba comer, la pastilla era en caso de emergencia o de cualquier cosa.
También tenía varios antídotos a diferentes venenos, nunca se sabía que iba a pasar.
La cuarta era una biblioteca, en donde tenía de todo, desde libros de artes marciales y de como manejar armas, hasta cómics y mangas para entretenerse, Izuku podría ser muy serio, pero aún le gustaba divertirse.
La quinta parte era una herrería, donde tenía infinidad de shuriken, bo, espadas, guadañas, todo tipo de armas, aunque el era más de usar los puños, igual le venía bien entrenarse con armas por si acaso.
La sexta parte era un almacén, donde tenía cantidades gigantes de las cosas que usaba para sus experimentos, ya sean hierbas medicinales, metales, ladrillos, cuerda, herramientas, cualquier cantidad de cosas.
La séptima parte era una sala de entrenamiento extremo, esta simulaba entornos extremos donde Izuku entrenaba, que si era un lugar donde hacía mucho calor, que si era un lugar con demasiado frío.
Aunque cabe decir que esta solo regulaba la temperatura, aunque a Izuku le era suficiente, un lugar donde podía hacer ejercicios como si estuviera en pleno desierto o en pleno invierno le servían bastante.
La octava parte era una sala de juegos, en esta tenía juegos de mesa, consolas de videojuegos, televisores de pantalla plana, muebles super cómodos, mesas e incluso dulces, esto era más que todo para divertirse, aunque si tuviera un amigo, cosa que no tiene, lo invitaría a esa sala a jugar.
Y la novena y última parte era un baño..... ¿qué? ¿esperaban que fuera otra habitación super lujosa de millonarios? Pues no, al peliverde no se le hacia muy cómodo tener que subir desde el sótano al baño de su casa cuando tenía ganas de ir al baño.
Izuku entró a su laboratorio y se dispuso a trabajar en una fórmula que había estado trabajando, la formula era para una bomba que tenía pensada, pero esta en lugar de explotar y de herir, lo que haría sería congelar, pero para eso primero tenía que hacer una fórmula química que apenas se expusiera al aire se enfriara, lo cual no era fácil, la química no era el punto fuerte de Izuku, el era más de la mecánica y otras cosas.
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Yo..... Soy Batman
RandomIzuku Midoriya, un niño que en una simple noche lo perdió casi todo, primero descubre que nunca podrá cumplir su sueño de ser un héroe, y luego un villano lo ataca y su padre se sacrifica para protegerlo. El joven Izuku, motivado por una promesa, de...