Pregnancy Counterattack.

Capítulo 8: Indulgencia. Parte 2.

Qu Cheng agarró la barbilla de Xu Cinian con fuerza, obligándolo a soportar besos cada vez más intensos.

Las lenguas de los dos estaban enredadas y ninguna cedía. Xu Cinian sintió que sus labios estaban a punto de hincharse así que decidió apartarse de ese extraño hombre.

Un fluido corporal transparente se desbordó de las hendiduras de los labios del otro, deslizándose por su mandíbula, dejando marcas ambiguas.

Qu Cheng le mordió el labio y Xu Cinian resopló y lo miró irritado, sus ojos borrachos estaban llenos de humedad y había un rastro de confusión ante esta situación desconocida, lo que hizo que Qu Cheng suspirara. Le rodeó la cintura con los brazos.

— Maldita sea, no me mires así.

Xu Cinian apoyó la frente contra su pecho, respirando con dificultad, casi sofocado por el beso.

Solo tuvo había besado a Dong Feng, pero ambos siempre se detenían a medio camino. Dong Feng le tenía miedo, así que no se atrevió a ir demasiado lejos, por lo tanto no tenía mucha experiencia en esta área. Así que nunca pensó que besar pudiera ser una situación tan feroz, incluso más que pelear.

— Estás distraído.

Qu Cheng le mordió la nariz con insatisfacción y le chupo los labios un par de veces

— Mírame.

Xu Cinian bajó la cabeza sin ninguna respuesta.

— Mírame.

Qu Cheng repitió de nuevo, apretando a Xu Cinian entre sus brazos, apretando más y más su cintura.

— ¡De acuerdo!

Xu Cinian gritó dolorosamente, y luego, vio un par de ojos oscuros cuando levantó la cabeza.

Qu Cheng dijo con una voz dulce que contrastaba con su rostro frio

— Ya te dije que olvides todo lo anterior y te concentres en mí.

Su voz parecía venir de muy lejos del espacio exterior. Xu Cinian podía escuchar cada palabra con claridad, pero no podía entender el significado cuando se unía la oración, solo podía fruncir el ceño en confusión y no decir nada.

— Mira lo estúpido que eres.

Qu Cheng sonrió y le mordió los labios, luego retrocedió unos pasos, su cara se puso seria.

— Ya que no quieres hablar, no digamos nada, pero diré esto primero. Mientras digas que no, este asunto nunca pasó entre nosotros, podrás volver a tu celda y nunca volveré a verte. Haré lo que quieras.

Xu Cinian solo sintió frío en sus brazos, la "fuente de calor" de repente lo dejó, como si lo hubieran apartado del fuego para ponerlo junto al hielo.

Este sentimiento era tan malo que no pudo evitar fruncir el ceño y extendió la mano para agarrar a esa "fuente de calor".

Qu Cheng no se inmutó, todavía se quedó parado allí.

No es una persona que les ruegue a otros, muchas personas han querido estar con él. Pero no le gusta obligar a otros. Pero la situación cambia con Xu Cinian, había una voz en su corazón que constantemente le recordaba que el pavo real frente a él era diferente a las demás personas y tenía que tomar en cuenta su opinión.

Hasta hace unos momentos, estas dos personas se habían estado besando, pero ahora estaban paradas como dos estatuas, la atmósfera instantáneamente se volvió fría.

Justo cuando Qu Cheng se burlaba de sí mismo y estaba a punto de darse la vuelta y marcharse, Xu Cinian de repente se acercó y lo abrazó.

El corazón de Qu Cheng de repente dio un vuelco