🌷La Puerta 🌷/Cancelada Temporalmente

Un Duende Relojero

Al cruzar la barrera, la chica sintió como su cuerpo se hacía más pequeño, luego miró atrás, y noto la diferencia de altura, que el mundo fuera de la barrera se veía mucho más grande.

Siguieron caminando hasta llegar a unas de las casas, que parecía ser sencilla. Las paredes de madera que eran parte de un pequeño arbusto de ahí y varias hojas como techo, adema saque dicho arbusto le servía como sombra para la casa. El fauno dio tres leves golpes a la puerta, después dio una pausa para luego dar un solo golpe, y repitió el proceso una segunda vez. Así se escucharon unos pasos rápidos, para después ver cómo se abría la puerta, mostrando a un ser con complexión delgada, parecía ser ya mayor, el describirlo es difícil, ya que parecía ser más algún tipo de tallo no antes conocido, teniendo ojos negros, y orejas un tanto alargadas y algo puntiagudas, con lo que aparentemente era barba y cabello abundante asimilando a al diente del León, y teniendo al rededor de su cuerpo y cabellos algunas hojas y tallos  de cuya planta, su vestimenta era de ropa café oscura, la parte de la  nariz y las orejas eran levemente rojizas. Cuando le veía tenía muchas similitudes a como pensaba que eran los duende (dando por echo que lo era), pero lo único que no le encajaba con esa imagen era el reloj colgante que sostenía en la mano, ya que eso, según ella, solo era del mundo humano.

-¿Como consiguió el reloj?- Preguntó con un tono de intriga y un poco de emoción.

Apenas abría la puerta y ni un hola tuvo como saludo ; ya que la niña ni tiempo le dio a los otros de saludar; así que un poco indignado, solo por ser quien era la niña, no fue "agresivo" con sus palabras.

-Pequeña Cristal, buenos días, dichosos los ojos que la vuelven a ver.- La menor estaba asombrada de su forma tan educada de hablar y de que también la conocía.- Pocas han sido las visitas de nuestros amigos ha esta humilde casa.- Al decir eso, los que acompañaban a la niña, buscaban donde meter la cabeza, ya que era cierta aquella información, dejaron de visitar a su amigo del pasado, no como antes, que sus visitas eran muy continuas, aunque su ausencia no era con mala intención, solo que se encontraban ocupados.- Así que me disculpo por no estar preparado para sus ya conocidas preguntas repentinas.-Eso le asombro todavía más a la menor, que al parecer ella tenía gran amistad con el personaje que tenía al frente, que hasta se había acostumbrado a sus constantes preguntas.- Pero primero pasen por favor, con una buena taza de té responderé todas tú preguntas pequeña luciérnaga.- Ya dos apodos le habían puesto, lo cual se le hacía raro, preguntaría de eso después. El duende abrió bien la puerta, haciendo una reverencia dio paso a los visitantes, cuya acción fue imitada por los que entraron a la casa, el fauno dio una sonrisa como saludo, lo cual fue devuelta por el contrario, por el contrario, la hada solo saludo sacudiendo la mano, cuyo saludo fue respondido casi igual pero con más elegancia.

Tan solo entro a la casa, y ya había observado que en la sala había otro reloj pero de madera y que seguramente tenía una figura adentro de algún animal del bosque, con eso se dio una idea qué tal vez abría un reloj en cada cuarto que hubiera en aquella casa.

-Llegaron a tiempo para él té justamente. -Dijo dando a ver una mesita de madera con una tetera como de porcelana, donde salía un poco de vapor, el dueño de la casa fue por unas tazas extras; la menor observó hasta lo que si vista le permitió y observó un dibujo echo seguramente una niña de mínimo 6 años, donde estaban cuatro personas, y aunque el dibujo no era muy elaborado, por los colores usados, supuso que eran sus tres amigos y una niña que estaba con ellos.
Por alguna razón, ese dibujo casi le obligó a sonreír y ella no sabía porque, además que desde hace momentos atrás, todo ese nuevo mundo para ella, la hacía sentir en casa, y la pequeña no sabía el porque.

Ya todos sentados en esa mesita, cada quien con su respectivo té verde, el duende se dispuso a responder aquella pregunta.