Mi destino es servirte

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Wei WuXian recuerda claramente que luego de que saliera de Los Túmulos Funerarios, tras ser arrojado hacia su muerte por Wen Chao, su primer preocupación fue ir en busca de Wen Ning, el amable joven de ojos verdes que le ofreció su ayuda para sacarlo de ese maldito lugar, y como recompensa por su generosidad, él lo arrastro hacia su mierda.

Cuando llegó a la oficina de Qishan, dónde Wen Chao lo había mantenido encerrado, él se encargo personalmente de asesinar a todos y a cada uno de los discípulos de la Secta Wen.

Incluso ahora puede verse caminando sin prisas por los pasillos que lo conducían hacia la celda dónde una vez lo mantuvieron prisionero y fue ahí, en esa misma celda, dónde encontró al joven que había estado buscando.

Wen Ning estaba encadenado de pies y manos, casi de la misma forma que él lo había estado cuando Wen Chao destruyó su cuerpo, al principio sintió un horrible escalofrío que le recorrió la columna vertebral, al grado de casi hacerlo vomitar, el solo pensar que tal vez ese inocente joven también se vio obligado a vivir su mismo infierno le hace querer destrozar todo, pero para su fortuna o su desgracia, Wen Chao solo lo eligió a él como su juguete.

Wen Ning estaba cubierto de heridas y completamente inmóvil, en su pecho había una espada atravesando su corazón, Wei WuXian empuño su mano, llenó de rabia, todo había sido culpa suya, si tan solo no hubiera aceptado su ayuda, tal vez él aún seguiría con vida.

Inmediatamente la energía resentida comenzó a reunirse a su alrededor y llevándose a Chenqing a los labios, toco una cuantas notas, indicándole el camino por el cual debe ir, y ese camino conducía directamente hacia el cuerpo sin vida de Wen Ning.

En instantes, el cadáver inherte de aquél joven se llenó con toda esa energía oscura, sus ojos se abrieron de golpe, antes de dejar salir un horrible rugido que escapó de sus fríos labios, y rompiendo las cadenas como si fueran ramitas, camino hacia donde estaba Wei WuXian, quién permaneció inmóvil por un largo minuto, meditando en lo acababa de hacer, antes de salir de ese lugar.

Wei WuXian aún recuerda haber usado a ese pobre joven, junto con, El Sello del Tigre Estigio como su mejor arma durante, La Campaña para Derribar sol

Wei WuXian camina por el oscuro sendero a través de Los Túmulos Funerarios, hasta llegar a una enorme cueva, el aire frío que sale de su interior casi podía helarte hasta los huesos, una mujer con gastadas túnicas del sol, que permanecía  oculta b...

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Wei WuXian camina por el oscuro sendero a través de Los Túmulos Funerarios, hasta llegar a una enorme cueva, el aire frío que sale de su interior casi podía helarte hasta los huesos, una mujer con gastadas túnicas del sol, que permanecía  oculta bajo el manto de la noche, camino hacia él, a su detrás una anciana, un niño, un hombre y unas cuantas personas más, se reunieron a su alrededor.

—¿Para que querías vernos Joven Maestro Wei?.

Wei WuXian apretó las manos en puños con tanta fuerza que sus nudillos se pusieron blancos, cerro los ojos y respiro profundamente.

—Wen Qing, yo….

Wen Qing jamás olvidará la noche en la que conoció a Wei WuXian, ella y todos los de rama secundaria de la Secta Wen, habían sido tomados prisioneros en la oficina de supervisión de Yiling una vez acusaron a Wen Ning de traidor.

El Vacío De Tu AusenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora