La muerte es cruel, injusta y malvada, un ser que carece de corazón. Quizás sea verdad, quizás sea mentira, nadie lo sabe porque nadie la ha presenciado en persona y ha vivido para contarlo.
Sin embargo, la verdad es que la muerte se preocupa por al...
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Es el año 2035 y se puede notar como en la oscura sala de Grimmauld Place, el ambiente había cambiado notablemente desde los días de desorden y polvo. Las telarañas habían sido limpiadas, los retratos de los miembros de la casa Black lucían impecables, y los antiguos libros, botellas de pociones y objetos mágicos estaban ordenados en los estantes, mostrando un brillo renovado. El mobiliario, antes desgastado, parecía haber sido restaurado, y las pesadas cortinas habían sido reemplazadas por unas nuevas de seda, permitiendo que una luz tenue iluminara el lugar.
En una esquina, una grande chimenea de ladrillos negros ardía, proporcionando un calor reconfortante en la fría sala. Frente a ella, un joven de treinta y tres años ajustaba un reproductor de música, buscando la canción perfecta para acompañar su soledad.
Mientras ajustaba el reproductor, los susurros comenzaron a intensificarse, llenando su mente con palabras hirientes.
"No eres nada más que un problema, Harry" susurraban las voces, ""No eres especial, Harry. Eres solo un niño raro".
El joven, Harry, cerró los ojos, tratando de bloquear los susurros, pero estos solo se hicieron más fuertes, acompañados de horribles alucinaciones visuales que distorsionaban la realidad a su alrededor, los retratos de los Black se transformaban en rostros grotescos y burlones, y las sombras danzaban de manera amenazante.
La fatiga extrema y el insomnio habían dejado su marca en él. Su piel estaba pálida, sus ojos hundidos, y su cuerpo mostraba signos de una pérdida significativa de peso. A pesar del el apoyo psicológico que recibía, la maldición seguía su curso inexorablemente, llevándolo cada vez más cerca de un colapso mental completo.
La música llenó la sala, y, sorprendentemente, los susurros comenzaron a atenuarse hasta desaparecer por completo. Las alucinaciones visuales se desvanecieron, las paredes dejaron de derretirse, los retratos recuperaron su forma original y las sombras se disiparon, devolviendo la sala a la normalidad.
Harry se dejó caer en la alfombra frente a la chimenea, sintiendo cómo la desesperación lo envolvía. Sabía que su tiempo se agotaba, pero en ese momento, solo quería un poco de paz, aunque fuera solamente efímera.
La lucha del joven contra los Susurros de la Desesperación era una batalla constante, una que sabía que no podía ganar, pero en la que se negaba a rendirse. En la oscura sala de Grimmauld Place, rodeado de recuerdos y fantasmas del pasado, encontraba la fuerza para seguir adelante, un día a la vez.
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"There I was completely wasting" Ahí estaba, completamente perdido
"Out of work and down" Sin trabajo y deprimido
"All inside it's so frustrating" Todo en mi interior es tan frustrante
