Capítulo 2: Pasta base

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Ya había pasado dos días desde que Pablo consumió su primera marihuana. 

Ya no era el mismo. Necesitaba más potencia. Experimentó con diferentes drogas tales como cocaína, lsd, heroína incluso. Pero nada lo hacía sentir vivo de nuevo. 

Ding Dong

Era la puerta. Pablo se puso sus pantalones y fue a abrirla.

Joako: ¿Así que, como esta mi cliente favorito?

Pablo: Estoy literalmente muriendo, dame algo por favor

Joako: Creo que esto te hará de lo mejor

Joako procede a entregarle una bolsita con un polvo blanco

Pablo: Ya te dije que me aburrí de la coca

Joako: Oh no no no, esto no es ninguna coca, amigo. Esto es lo más alto del negocio. Esto es pasta base

Pablo: Pa-Pasta base?

A Pablo le costaba respirar, le temblaban las piernas y sus brazos se sentían débiles. Sentía que iba a vomitar. Había almorzado el spaghetti de su madre, así trataba de aguantarse. Aguantarse por ella. Había escuchado a sus profesores hablar de la pasta base. No estaba seguro de esto

Pablo: Dame toda tu mercancía.

¡¿Por que hizo eso?! Fue culpa de los nervios. No estaba listo para esto pero tampoco podía decirle que no a su dealer, lo mataría en el lugar. Después de todo, Joako acababa de consumir cristal.

Joako: Sheesh, toda mi mercancia!? Estas loco, hombre, pero me agradas. Serán 5 grandes.

Pablo: 5 Grandes...

Sorprendentemente barato, tal vez podría aprovecharse de este tipo...

Rompiendo A PabloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora