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chapter nineteen

Jimin soltó una suave carcajada mientras platicaba con Taemin, el chico al que había conocido dos meses atrás. En tan poco tiempo a Jimin le había agradado muchísimo aquel chico, y se podría decir que era el único amigo de el pelinaranja.

-¿Y sabes que le dijo después?- Dijo entre risas.

Jimin lo miró atento, esperando a que continuará.

-¡Le dijo qué el no...!- Jimin se desconectó un segundo de la conversación cuando miro por sobre el hombro de Taemin y miró a un chico se cabellos rubios caminar con la mirada gacha por los pasillos. Se le hizo extraño, tenía una sensación familiar en el pecho y siguió mirando a aquel alto chico, que tanto le había llamado la atención. Solo que no sabía quien era, ya que estaba de espaldas. Tal vez si lograra ver su rostro lo reconocería, o tal vez era algún viejo amigo de la secundaria, quien sabe.

Taemin tocó la mejilla de Jimin mientras lo miraba con un puchero.

-¿Me estabas escuchando?

Jimin miró de nuevo a Taemin y asintió un poco.

-Sí, sí, lo siento... Solo me distraje un poco

-¿Y con que te distrajiste, eh?

-Con nada, solo miraba a la gente pasar

Taemin miró hacía atrás a las personas ir caminando, miró de vuelta a Jimin y siguió con sus dedos el punto a el que Jimin estaba viendo. Luego soltó una risita al ver de lo que se trataba.

-Ah, es ese rubio.

Jimin lo miró confundido y rápidamente negó. -¿Qué? No, no estaba mirándolo.

-¡Claro que lo hacías! Te ví

Jimin bufó. -Solo me gustó su cabello... eso es todo

Taemin se encogió de hombros. -Bueno, como digas. ¿Ya nos vamos? Las clases están por comenzar de nuevo -Jimin asintió y se levantó mientras le sonreía al contrario.- Sí, vamos- Respondió.

Ambos se encaminaron a sus respectivos salones, se despidieron ya que ese día les tocaba estar en salones distintos. Jimin odiaba eso, no le gustaba estar sin Taemin pues no conocía a nadie más y se sentía muy solo cuando él no estaba a su lado. Suspiró y se sentó en la banca del fondo del salón, recosto su rostro entre sus brazos y colocó su mochila en sus piernas mientras esperaba a que el salón se llenara de gente, decidió descansar unos minutos y cerró los ojos.

Tiempo después el profesor cerró la puerta y dio por iniciada la clase, rápidamente Jimin se incorporó en su lugar y se talló los ojos para luego bostezar. Miró hacía el frente y se sorprendió un poco cuando logró ver a el mismo rubio de hace rato sentando frente a él. Mierda, quería ver su rostro y saber si lo conocía, se le hacía demasiado familiar y ni siqueira sabía el por qué.

-Chicos, el día de hoy tenemos a un nuevo alumno, viene de Daegu, les pido por favor que lo incorporen a la clase y traten de ayudarlo si tiene alguna duda respecto a los temas vistos, ¿Entendido?

Todos asintieron, musitando un largo "Sí"

Jimin hizo un inconsciente puchero cuando el chico nuevo no se presentó ni dijo su nombre, aparentemente era muy callado, pero Jimin no lo juzgaba pues él era igual.

Idiota! -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora