Entrelazados

Capitulo 1 : Un día cualquiera

Hola soy Eren tengo 16 años, el pelo castaño y los ojos verdes, soy delgado y mi carácter es tranquilo, tímido y algo pervertido además mis aficiones son el anime y los videojuegos, tengo una hermana 4 años mayor que yo y vivimos con mis padres en el centro de Tokio. Y hoy como un día cualquiera me había levantado para ir al instituto, me vestí con el uniforme y bajé a desayunar con mi hermana como siempre.

Aiko : Hoy has tardado más de la cuenta,¿ te han pegado las sábanas? - dijo con su característica alegría -

Eren : Ayer me fui tarde a dormir y hoy me ha costado levantarme.

Aiko : no debe...

Antes de darle tiempo a que me suelte su habitual charla, me levanté de la mesa y me fui hacia el instituto.

De camino al tren me encontré a mi mejor amigo Daiki, que vive a dos manzanas de mi casa, el es alegre, despistado y patoso además tiene las mismas aficiones que yo, tiene el pelo negro y alborotado y tiene los ojos color café oscuros además me gusta pero el no lo sabe.

Daiki: ¡Hola Eren! -dijo de forma enérgica y alegre -

Eren : ¿ Estás muy alegre hoy, no ? - dije extrañado -

Daiki : Es que hoy me he levantado contento - dijo con una gran sonrisa mirándome fijamente a los ojos, sin duda alguna estaba enamorado de él -

Yo me sonroje y me adelante rápidamente para que no se notara, durante la corta caminata hacia el tren tuvimos nuestras típicas conversaciones de anime que se alargaban hasta llegar a las puertas del instituto.

En el instituto todo era aburrido aun así después de clases me quedaba para ver a Daiki jugar al fútbol y luego irnos hacia casa los dos juntos, como un día cualquiera.

( Al día siguiente)

Al siguiente día me desperté de forma alterada, no reconocía nada, estaba en una habitación infantil y no se parecía a nada a la mía, era no muy grande la cama era pequeña pero se acomodaba bien a mi cuerpo las paredes eran blancas y una azul tenía un escritorio con un ordenador encima y enfrente una ventana, la puerta estaba a un lado de la habitación y había un armario pegado a la pared . Mi primera reacción fue gritar, al gritar no reconocía mi voz, era como un sueño aunque parecía demasiado real para que fuese un sueño y allí me pude dar cuenta de una cosa, ese no era mi cuerpo.

Tras el grito pude escuchar abrirse la puerta de forma repentina, y allí apareció una mujer de unos 30 años delgada y con el pelo rubio.

Mujer : Cariño, ¿ha pasado algo? - dijo alterada -

Eren : ¿ Y-yo donde estoy ? - dije conmocionado -

Mujer : Como que donde estas, ¿ has tenido una pesadilla? , venga prepárate que nos vamos al cole.

Tras eso ella salió por la puerta cerrándola a su paso. Yo, aun extrañado me levante de la cama, y ahí me percate que era mas bajo y mis manos eran de niño, fui al baño y me mire al espejo y mi rostro también era diferente, era un chico rubio de ojos azules y de unos 8 años. Al ir a orinar, también me di cuenta que no era igual a la mía, era como la de un niño, pese a que estaba solo aun así me daba vergüenza orinar.

Busque entre la habitación una ropa que pareciera del colegio, me la puse y salí de la habitación, al salir pude ver un no muy amplio salón de estar típico de un apartamento, me quede unos segundos mirando y la mujer me hizo un gesto invitándome a sentarme en la mesa.

Al sentarme en la silla era un sensación extraña porque no llegaba al suelo, además la mesa estaba un poco alta, era un fastidio.

Mujer : parece que la pesadilla aun te dura, te dije que no te quedaras con tu hermano viendo esas películas, tu eres muy pequeño para eso. - dijo regañándome -

Yo me limite a seguir comiendo y pasar de ella, ya estaba acostumbrado a eso. Después de desayunar la mujer que asumí que era mi madre y yo fuimos hacia el coche para ir al colegio