Dedicado a mi amigo Marcos Terrens
¡Vos sabés cuánto te quiero!,
hermanito de la vida,
regalo de las estrellas,
para agrandar la familia.
Sonrisa cada mañana,
palabra justa y certera,
barrilete de ternura,
que se va llevando penas.
¡Sí hasta acepto reprimendas!,
como si fuera pequeña,
porque nacen del afecto
y en el cariño se entregan.
Vamos mezclando entre versos,
colores de una paleta.
Feliz me pintaste el alma,
al conocerte ¡poeta!