"Amigos"
Cuando Kirishima era un niño sus padres fueron asesinados, los recordaba como unos padres muy amorosos siempre al pendiente de él, siempre recordándole cuánto lo amaban.
En general su infancia fue muy agradable y todo gracias a los amigos que hizo, Mina y Denki, sus mejores amigos desde siempre, luego cuando se mudó a casa de su abuela, conoció a Sero hijo del dueño del acuario.
Como habían congeniado rápidamente, Kirishima se los presentó a Mina y Denki un sábado en las vacaciones de Verano en las que fueron a visitarlo, Sero también se llevó muy bien con ellos.
Eijirō agradecía tener unos amigos como ellos, eran su equipo de apoyo emocional y físico, aunque dos de ellos estuviesen lejos la mayoría del tiempo Kirishima los amaba a los 3 sin importar que y ellos también lo amaban.
Creyó que un día los 4 podrían rentar un departamento cuando terminarán la preparatoria, que irían a la misma universidad, que incluso un día llegarían a vivir en el mismo asilo cuando fueran viejos.
Por eso, fue el primero en saltar de alegría cuando consiguieron comprar un departamento cerca de la universidad, habían sido años de ahorros para lograrlo, estaban emocionados.
El examen de ingreso fue difícil, pero Eijirō había estudiado tan duro para ese momento que no se dio por vencido y lo logró, logró pasar el examen.
Su abuela se emocionó tanto, también lloró porque eso significaba que su adorado nieto estaría tan lejos de ella, pero aceptando que era momento de dejar que su niño hiciera su vida lo dejó ir.
Pero cuando parecía que la vida iba de maravilla, todo dio un giro de 180 grados.
Cuando Mina le dijo que iría a comprar más cerveza al minisuper Eijirō no dudó en decirle a su amiga que iría él en su lugar, porque era de noche y era peligroso para ella.
--Siempre preocupandote por mí, tan lindo. --Le dijo ella. --Trae algunas botanas también, sabes como es Denki de glotón.
--¡Oye, tú también lo eres! --Se quejó el rubio.
Eijirō sonrió. --Lo haré. Vuelvo enseguida.
Pero no pudo regresar.
Aquella noche que debía ser una celebración se convirtió en una búsqueda desesperada y después, en un triste funeral sin cuerpo.
Porque no pudieron encontrar un solo rastro del cuerpo del pelirrojo, lo único que lograron encontrar fue una fotografía llena de sangre donde se veía a un grupo de amigos alegres frente a una preparatoria y un trozo de la que solía ser la chaqueta favorita del pelirrojo.
Mina, Sero y Denki se culpaban a sí mismos por no haberlo acompañado, pensando que de alguna manera sí hubieran estado con él no le habría sucedido algo así.
La abuela, se sentía tan culpable por haber dejado que se fuera a Tokyo, por dejar que se fuera de su lado, nunca se perdonaría haberlo dejado irse, se sentía completamente sola.
Viajó a Tokyo no para sentarse a esperar noticias, sí no para buscarlo ella misma, al borde del cansancio colapsó y cuando le dijeron que su nieto aparentemente había muerto y le entregaron lo que quedaba de la chaqueta que le había regalado a su nieto por haber pasado el examen de admisión lo que quedaba de su corazón se quebró.
Esa noche durmió aferrada a lo que quedaba de su nieto.
Denki, Mina y Sero estuvieron visitando a la mujer lo más que podían, pues las clases de la universidad ya habían comenzado.
Siempre murmuraba mientras cosía.
--El volverá, debo reparar su chaqueta, sí no lo hago él estará triste.Mina le llevaba tela cada que podía, Denki le compraba hilo y Sero le ayudaba con la aguja.
Nunca la dejaron sola, incluso cuando ella fue dada de alta vendieron el departamento y pagaron a una enfermera para que la cuidará en Jeju, la llamaban por Skype cada noche antes de que se fuese a dormir y la escuchaban hablar de todo lo que había hecho.
--¿Eijirō ya comió verdad? Debe alimentarse bien para que no se enferme.
Denki sonrió con ojos vidriosos. --Sí abuela, él ya comió, nunca dejaríamos que Eijirō se olvide de comer.
Mina y Sero no pudieron hacer más que tragarse las lágrimas, no tenían el coraje de decirle a la abuela que su nieto ya estaba muerto y que debía dejar de engañarse.
--¡Así es, nunca dejaríamos que Kirishima se olvide de comer!
Ella sonrió. --¿De verdad? Lo sabía, ustedes son tan buenos, mi Eijirō es tan afortunado de tener amigos como ustedes.
--Abuela es hora de dormir. --Se escuchó la voz de la enfermera. --Vamos a darle la medicina ¿Está bien?
La abuela se quejó. --Pero, aún no hablo con Eijirō.
La enfermera contestó. --Seguramente ya está dormido porque está cansado, es Lunes y seguramente la universidad toma mucha de su energía ¿Verdad? Déjelo descansar.
--Oh, sí, tienes razón, hay que dejar que reponga sus fuerzas, ¡Le dicen que llamé! ¿Sí? Cuídense mucho chicos. --Y colgó la videollamada.
Denki que ya había comenzado a derramar lágrimas suspiró y cerró la laptop, Mina y Sero que también habían comenzado a llorar lo abrazaron.
--Te extraño tanto. --Murmuró el rubio.
--Todos te extrañamos. --Dijo la pelirrosa.
--Nunca te olvidaremos. --Juró el azabache.
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Kirishima sonrió, el sol estaba en lo más alto, los árboles del campus tenían una energía tan llena de paz que le parecía tan hermoso.
--Oi, pelo de mierda, no olvides que vamos a buscar más información sobre lo que te sucedió, está noche.
Kirishima asintió todavía sonriendo.
Katsuki se sintió mal al recordar que alguien había asesinado a sangre fría a alguien como el chico frente a él.
A aquel que todavía a simple vista se notaba que le faltó mucho por vivir.
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Fantasma【Bakushima】
FanfictionBakugō Katsuki es un chico con el don de ver espíritus, su madre era una médium y su padre un sacerdote retirado. Un día como cualquier otro en la odiosa universidad mientras Bakugō se concentraba en la clase de administración aparece un fantasma mu...