CAPITULO 2

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Recuerdan que dije que me involucre con un chavo que tenía novia bueno ese es Armando, les contare como fue que paso. Hace un año que me diagnosticaron con este trastorno bueno en ese año me paso de todo, antes de que cometiera el gran error de salir con Armando tenía un novio éramos felices hasta que empecé a tener mis problemas mentales, el no supo cómo manejarlo y siempre nos peleábamos por la misma discusión Iván siempre estaba cerca de mi así que me termino dejando supongo que lo hizo por su bien más que nada que por el mío.

Bueno Armando ya me hablaba antes de todo esto, pero solo era por asuntos de la escuela, así que no era muy importante que digamos por eso mismo se me hizo muy raro recibir un mensaje del preguntado mi estado emocional.

-Hola ¿cómo estás?

- que tal, bien gracias ¿y tú? - que necesita ahora si no hay trabajos pendientes que entregar.

- Bien, bien gracias ¿Qué haces?

-amm viendo la tele en la sala.

- qué bueno me alegro.

- ok ¿que necesitas? No hay trabajos pendientes, y tú nunca me hablas al menos que necesites ayuda con tus tareas- le pregunte con un tono molesta y fastidiada.

- tranquila solo quería saber cómo estabas, no soy el tipo de persona que solo busca a la gente para su beneficio.

Después de ese mensaje ya no le conteste no creía en nada de lo que me decía es obvio que necesitaba algo solo era cuestión de tiempo en que me pidiera el favor. Después de eso me miraba cada vez que podía y trataba de hablarme, me seguía y me ponía la sonrisa más falsa que había visto en mi vida. Por qué estaría siguiéndome tiene a su novia que la siga a ella porque a mí.

Recuerdo que una tarde después de clases, mi tío no podía pasar por mi así que me tenía que ir sola a la casa, no me molestaba en realidad amaba caminar sola de hecho era una experiencia muy agradable para mi podía caminar a mi propio paso, escuchando mis canciones favoritas sin que nadie me diga nada era simplemente hermoso. Durante el trayecto de mi salón hasta la salida del colegio veía a Armando a lo lejos estaba solo al parecer su novia ya se había ido, igual a mí no me interesa realmente. Seguí caminando, ignorando totalmente su existencia, aunque el no ignoro la mía me empezó a seguir, yo simplemente ignore su presencia me puse los audífonos y empecé a disfrutar la música, no fue por mucho tiempo en realidad me estaba sintiendo realmente incomoda sintiendo esa mirada penetrante que me irrita mucho no importa cuánto trataba de ignorar o era realmente imposible si seguía mirándome así.

- ¿hasta dónde me piensas seguir? - dije mientras lo miraba con enojo he incomodidad.

- Hasta que me dirijas la palabra- dijo con una risa mientras traba de sostenerme de los hombros.

- ¿Qué tan importante es lo que me tienes que decir que hasta me sigues mientras camino a mi casa? - dije eso mientras apartaba sus manos de mí, pero cambio su expresión en cuanto termine de decir esa frase su cara se estaba trasformando en una que realmente no conocía sus ojos se llenaban de lágrimas y sus brazos de veían tan tensos ahora me sentía mal de a ver sido tan poco sensible- ¿oye estas bien? No quise sonar grosera, pero es un poco extraño que me hables de la nada- ya estaba más tranquila son un sentimiento de culpa que empezaba a sonar en mi mente.

- No tienes por qué disculparte, tienes razón casi no te hablo y cuando lo hago siempre es porque necesito un favor- se veía tan decaído mientras decía esas palabras.

- No debí a verlo dicho así fui muy insensible pensé rápido lo peor no imagine que estabas pasando por un mal momento- baje la mirada me sentía muy avergonzada por mi actitud- bueno te escucho ¿qué te tiene tan triste?

UN DEMONIO EN MI MENTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora