Cuando las cosas cambian (NejiSaku)

Comienzo

Sakura sonrió mientras entraba en la habitación, Lee la saludo desde la ventana, efusivo como siempre, Tenten le devolvió la sonrisa, estaba sentada en la silla intentando que Neji bebiera las vitaminas que Tsunade le había dejado en la mañana.

―Buenos días ¿Cómo te sientes, Neji-san?

Alzo una ceja al ver la bata manchada de un líquido rojo. Era extraño que cada vez que venía a darle noticias sobre sus mejoras o hacerle algún examen, siempre tenía alguna parte manchada, el día de ayer había aparecido con la mejilla pintada. Era tan rara.

―Bien. ―contesto sin mucho ánimo.

―Volveremos en la tarde ―dijo Tente poniéndose de pie ―O en la noche.

Neji asintió. Los dos ninjas dejaron la habitación. Sakura tomo el lugar de Tenten, vio la bebida de vitaminas, intacta. Alargo la mano con el ceño fruncido.

―Tienes que beberlo, estas padeciendo de anemia.

Neji chasqueo la lengua, irritado ―¿Por qué no hemos comenzado con la rehabilitación?

Eso era lo que realmente le interesaba. Tenía una semana postrado en la cama sin nada más que hacer que contar los minutos y comer la comida del hospital, que se había vuelto desabrida.

―Por el mismo motivo por el cual necesito que bebes esto.

―Soy un ninja puedo manejarlo, no necesito esa cosa.

Acerco el vaso a su boca. Neji le sostuvo la muñeca y la empujo hacia atrás, no pensaba beber eso. Sakura forcejeo, entrecerró los ojos, levanto la mano libre y le dio un golpe en el abdomen, él se encogió y soltó el vaso. Logro empujar el líquido en su boca y luego le tapo la nariz.

Neji se vio forzado a tragar. Fulmino a Sakura con la mirada, la aparto de su lado y se limpió la boca. Tuvo el deseo de estremecerse, pero no lo hizo a pesar del vibrante sabor a fresas agrias que permaneció en su boca.

―No vuelvas hacer eso.

―Entonces no actúes como un niño ―reitero cruzándose de brazos.

Los dos se fulminaron. Sakura fue la primera en apartar la vista, se quitó el pelo de la cara volviendo a su carácter profesional.

―Se que estas ansioso y estresado, por eso persuadí a Tsunade para que hoy comiences con la rehabilitación de tus piernas y brazos. Pero tendrás que beber las vitaminas y los otros suplementos.

―Bien ―contesto.

La vio levantarse con el ánimo renovado, abrió las cortinas de par en par y se dispuso a preparar todo. Saco unos tubos de metal del armario, empezó a pegarlo hasta que creo una estructura parecida a las andaderas de un anciano, solo que era mucho más larga. Le dio la vuelta y la acerco a la cama, enrosco los tornillos de los lados y cuando vio que no se tambaleaba se giró hacia Neji, que observaba todo en silencio.

―Puede ser que sientas dolor o que no te respondan las piernas. Es algo normal.

Rodo los ojos. Eso ya lo sabía, se lo había dicho ayer en más de una ocasión.

―Como sea, empecemos.

Neji puso ambas manos en los soportes, coloco los pies firmes en el suelo y se levantó. Había pensado que sería más difícil, hasta doloroso, pero podía mantener su peso sin temblar como una hoja. Alzo la vista hacia Sakura, había entrado en el soporte, probablemente para asegurase que no se cayera.

˂˂Y no pienso caer˃˃ se dijo preparándose para el primer paso.

Tenía expectativas altas, dar unos pasos y luego otros sin ayuda del soporte. Pero murieron con la misma rapidez con la que cayo. Apretó los dientes con un fuerte deseo de soltarse, no escucho los pasos de Sakura solo sintió cuando lo agarro de la ropa y lo jalo hacia arriba.