Preparando sorpresas

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Camino hasta llegar con ellos y nos fuimos rumbo a la ciudad. Al llegar a la ciudad lo primero que hicimos fue buscar un lugar donde pasar la noche, encontramos un motel llamado "El Paso Rápido" fue curioso encontrarlo por que justo a unas cuadras estaba otro motel con el nombre de "El Paso Lento". Al entrar un señor de unos 70 años nos atendió amablemente y nos dio un cuarto, en ese momento Flynn sacó su billetera que tenía en la bolsa trasera de su pantalón y pagó la estadía. Entramos al cuarto y vimos una cama y un sillón nos dividimos así: yo y Annie dormiríamos en la cama y Flynn dormiría en el sofá. Antes de dormir decidimos comer y comprar una venda para mi cortada en la pantorrilla, Flynn decidió salir por las cosas y Annie y yo nos quedamos en el cuarto sentados en el sofá.
-Y bien...¿Cual es nuestro destino, Pete?
Me levanto y tomó un mapa que estaba en una mesa junto a la cocina.
-Mira.
Me siento junto a Annie y con el dedo índice indico al país de Perú.
-Este, este es nuestro principal destino.
-¿Por que?
-Mira, cuando los Españoles invadieron Perú dejaron varias cosas y pistas sobre donde se encuentran los 7 Templos de Oro, y creo que por ahí sería un buen lugar para empezar.
-Aún no entiendo una cosa...
-¿Qué cosa Annie?
-¿Cómo es que sabes tanto de esto?
-Cuándo vives en una casa de adopción y tiene una biblioteca grande y no tienes televisión...
-Oh.... Entiendo.
Escuchamos qué la puerta se abre y entra Flynn con comida, ropa, tres mochilas, alcohol y una venda.
-Flynn, te dijimos que sólo trajeras comida y la venda.
-Lose, Pete pero no podemos estar con la misma ropa mojada todos días.
-Buen punto...
-¿Que trajiste Flynn?
-Pan, cereal, huevos y leche
-Nada mal...
Tomo 3 platos ondos que estaban en la alacena y sirvo cereal en cada uno de ellos.
-Ustedes decidan cuánta leche le pondrán a su cereal.
Les entrego su plato y llevo la leche a la mesa que esta juntó con el comedor. Comimos sin decir ni una sola palabra y después decidimos irnos a dormir, Annie y yo nos fuimos al cuarto yo tome la venda para colocarla en mi pantorrilla y Flynn se acomodó en el sofá.
-Emm... ¿Me ayudas Annie?
-¡Claro!
Me siento en la cama y Annie se sienta junto a mi.
-Bien, ahora bájate el pantalón.
La miro y me sonrojo.
-Pe- pero...
-Vamos, ¿Qué tan penoso puede ser? Tienes calzones ¿no?
-Bóxers...
-¡Ves! Nada de qué preocuparse
-Bien...
Me quitó el pantalón y lo dejo junto a la cama, Annie toma la venda y el alcohol.
-Esto... Te podrá doler, Pete.
-No importa.
Corta una parte de la venda la dobla y deja caer un par de gotas de alcohol en ella y comienza a limpiar mi herida.
-¿Te duele?
-No, para nada
Toma la venda y comienza a vendar mi pantorrilla mientras yo miro al techo.
-Pete...
Bajo la cabeza y la miro.
-Dime...
-Me gustas
Baja la mirada y termina de vendar mi pantorrilla, Tomo mi pantalón y me lo pongo.
-Annie... Tu sabes que no soy el tipo de chi-
Se levanta y me besa, se separa y mira al suelo.
-Perdón.
Se tapa los ojos y comienza a llorar.
-Sólo me apunte a esto para estar contigo, Pete.
La miro y siento lástima, así que me paro y la abrazo.
-No, no llores Annie.
-Pero...
Le levanto la cabeza y me voltea a ver.
-Yo... En verdad estoy enamorada de ti...
-No te culpo por ello... Sólo que yo no esperaba que me lo dijeras así...
-Perdón.
-No, Yo soy el que debería pedirte perdón.
-Pero ¿Por qué?
-Por no ser capaz de sentir lo mismo...
-Entiendo, Pete.
-Cuanto lo siento en verdad...
-Mejor vamos a dormir.
-Okay...
Nos separamos Y acomodamos la cama para dormirnos y no dijimos ni una sola palabra mientras tendíamos la cama.
-Puedes voltearte... ¿Por favor?
-¿Por qué? Annie.
-No estoy acostumbrada a dormir con ropa...
-Oh... Ya entendí.
Me volteo y miro al suelo.
-Listo.
Volteo y miro a Annie en ropa interior.
-Ah... ¿Así vas a dormir?
-Si... ¿Por qué? ¿Te incómoda?
-Eh... Olvídalo....
Bajo el cierre de mi sudadera y me la quito junto con mi camiseta, quedándome sólo en mis Jeans azules.
-¿Tu dormirás así?
-!Tu dormirás en ropa interior! No veo que tiene esto de malo.
La miro reír y sonreír.
-Tienes razón.
Se acomoda en el lado izquierdo de la cama y yo junto a la parte derecha de la cama.
-Pete... Se me olvidó decirte algo...
-¿Que se te olvido decirme?
-Que... Yo... No puedo dormir si no estoy abrazando algo...
-¿Y cómo que se te ocurre?
-¿Puedo abrazarte?
Me acuesto boca arriba y miro al techo.
-Si es lo que quieres... Esta bien.
Se acerca a mi y pasa su mano derecha por debajo de mi espalda y su mano izquierda junto a mi ombligo y acostando su cabeza en mi pecho abrazándome.
-¿Así esta bien, Pete?
-Supongo
La veo cerrar los ojos y le besó la frente.
-Buenas noches, Annie.
-Buenas noches, Pete
Cierro los ojos y duermo.

Todo o nadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora