Black Past ©

Capítulo 9 - Director Shepard

*Él de la foto es el Director Shepard/ Luke Shepard*

- ¿Me estás hablando en serio?- preguntó Sophia.

Estábamos en el dormitorio de Dakota, nos habíamos bañado una por una para quitarnos el cloro de encima. Y siendo sincera ni el agua caliente logró quitarme el estrés de encima.

El pijama de Sophia consistía en unos pantalones cortos y ajustados de color negro, y una remera azul de tirantes de satén o de una tela similar. Dakota vestía un camisón corto de algodón negro que decía en letras grises: "No te atrevas a despertarme".

Yo había llevado uno de mis pantalones y de mis buzos para dormir, pero ni Sophia ni Dakota me lo permitieron. Al parecer, es un crimen dormir con tanta ropa. Dakota me forzó a ponerme un pantalón corto de color verde pastel y una remera blanca que decía: "Libertad de expresión". En mi opinión Dakota tiene una obsesión por las remeras con insignias.

No me sentía tan descubierta como hubiera estado hace un día. Ya me había sometido a casi estar desnuda frente a un chico que me examinó con la mirada como si fuera una estrella porno buscando trabajo.

- No puedo creerlo- dijo Dakota negando con la cabeza.

Asentí con la cabeza después de contarles lo que ocurrió en la piscina con Black. Ambas parecían sorprendidas, no sonreían cómo normalmente lo hacían. Parecían incluso preocupadas.

- ¿Irás?- elevó la ceja Sophia.

Observé a la rubia con el ceño fruncido.

- ¿Te juntarás con él?- repitió.

- No lo sé- susurré observando a un punto vacío-. ¿Tengo opción?

- Si se trata de Black- comenzó a hablar Dakota-, no lo creo.

- ¿De qué hablas?- preguntó Sophia rápidamente-. Si ella no quiere ir, no irá.

- Black siempre consigue lo que quiere- colocó su espalda erguida y su rostro serio no daba señal de broma alguna-. No recuerdo un Shepard que no haya conseguido lo que quiere- bufó la peli-azul.

Sophia se levantó del suelo y enfrente al espejo de la habitación de Dakota, se quitó la toalla de la cabeza.

- No puede ser tan así- negó Sophía comenzando a cepillarse el cabello.

- Claro que lo es y te daré un claro ejemplo: mi madre y Luke.

- ¿Qué pasa con ellos?

- Mamá lo detestaba- soltó un suspiro-. Pero Luke no se detuvo hasta conseguir una cita con mamá.

- Y se casaron- comenté confundida.

Elena no podría detestar a Luke si acabaron casados.

- Sí- asintió la chica en mi dirección-. Se conocen hace unos ¿diez años?- pensó durante unos segundos-. No lo sé, desde hace mucho tiempo. Mamá solía llegar a casa enfadada y exhausta- se dejó caer en la cama de espaldas-. Recuerdo como me hablaba mal de él- soltó una pequeña risa-, decía lo ricachón que era, lo estúpido... bla, bla, bla. Dijo que si no le pagara tanto, sin duda, se iría.

- ¿En serio?- preguntó la rubia al acabar de cepillar su cabello.

- En realidad yo no lo conocía- comentó Dakota volviendo a sentarse para mirarnos-. Me imaginaba al hombre como un pelado, panzón y desagradable. Pero cuando lo conocí, la sorpresa que me llevé- volvió a reír como si nosotras entendiéramos el chiste-. Todo comenzó un día hace unos tres años, creo. Luke veía un partido de la NBA y mamá como adicta al Basquetbol, comenzó a pelear contra Luke por quién era mejor jugando, si los...- pensó durante un segundo y después negó con la cabeza-. Ya ni me acuerdo qué equipos. En fin, apostaron a qué equipo ganaría el partido, y por supuesto que Luke venció a mamá.