23:30 pm y Madisson ya dormía profundamente. Habia tenido un dia un poco agitado.
Estuvo jugando y correteando todo el dia. Jugó con tierra y con agua. Luego cuando Matias no llegaba a buscarlos, Jonathan y ella se pusieron a hacer travesuras por todo el colegio. Al volver se baño, merendó. Después jugó con Jonathan, cenaron y fueron a dormir.
3:00 am. Una ventana del segundo piso se abrió lentamente mientras mientras Mike y Alessandra dormian. Era Jonathan, se estaba escapando. Bajó cuidadosamente tratando de no hacer ruido. Cuando ya estaba abajo corrió con una mochila en la espalda y una bolsa en la mano.
Estaba caminando cuando vio a un policía que estaba patrullando. Rápidamente se escondió, pero fue en vano. El policía se acercó a él, lo miró de pies a cabeza.
- Hola pequeño- dijo el policía poniéndose a la altura de Jonathan- ¿Que haces aquí a estas horas?-
Su corazón se aceleró al igual que su respiración. Miró a los lados buscando como escapar. En unos segundos ideó un plan.
- Me he perdido- respondio Jonathan con la cara más inocente que podía poner, sabiendo que en el fondo era un pequeño demonio.
-Oh, ¿sabes el número de tus padres?-
- No, pero si me dices la calle en la que estamos podria saber donde está mi casa-
- Vale, estamos en la calle _________
- Ah, pues mi casa está ahí- señalo a una casa vieja a su izquierda- Esa misma-
El policía lo miró y luego miró la casa. Le hizo una seña para fuera. Jonathan caminó hacia la casa mientras el policía los seguía
- Llama al timbre- dijo el pequeño- yo no alcanzo-
- Vale- tocó el timbre y esperó a que respondiera
Jonathan esperaba a que su plan funcionara tal y como el pensó.
De repente un hombre barbudo y calvo abrió la puerta.
- Hola señor. Al parecer su pequeño se perdi...
Un Dogo de bordeu salió y empezó a ladrarle al policía. Jonathan aprovechó el momento y salió corriendo. El policía y el hombre lo persiguieron pero lo perdieron en una esquina.
-Demonios. NIño travieso¡- dijo el hombre barbudo
-Tendré que hacer el reporte- se quejo el policia
Jonathan abrió la puerta de una y entro. Dejó la mochila en la mesa del comedor y le llevo la bolsa en las manos.
- Buenas buenas señor¡- dijo mientras entraba a la habitacion principal- Aca le traigo sus medicamentos y comida¡- empezó a poner una voz graciosa- Levante un dedo si se siente mejor, levante dos si no, levante tres si quiere dormir y levante cuatro si esta fatal¡¡
Entre las sábanas una mano pálida y débil levantó cuatro dedos y dejó caer su mano pesada en el colchón.
- !Caramba¡Vale, te ayudaré. Pero no seas terco como la otra vez.
ESTÁS LEYENDO
The four legends
CasualeEsta es la historia de cuatro leyendas. Dos de ellos están rotos por dentro, y los otros dos apenas saben quienes son. Madisson Miller es una pequeña, la cual, está descubriendo lo cruel que es el mundo. Quizás hay mucha crueldad en esta historia, p...
