El hijo del diablo

capitulo 17

ANIA WILLIAMS

Preparo el desayuno de donovan, mi pequeño le encanta desayunar leche con chocolate con un pastel o frutas.

—tenemos pastel donovan.

—shii. —aplaude con sus manitos—

—quiero que te acabes todo lo que te servi y saldremos a dar un paseo. —pongo el platito y su mamila en su sillita mientras lo acomodaba para que puediera comer—

—hola ania.

Pego un grito cuando veo a noradiana parada en la cocina.

—Dios!  Acaso todos son asi, entran sin pedir permiso.

—a lucifer no creo que le guste que digas "Dios" en esta casa.

—le guste o no es la costumbre que tengo.

—lose. —ríe—es algo que es imposible no decir o la palabra diablos también, como esta el mejor sobrino y principito de los infiernos.

—no quiero que digas eso. —murmuro—

—es así ania, el tecnicamente es el principe del infierno, es hijo de lucifer el rey del infierno,  eso lo convierte en principe.

—lose, pero no me gusta que lo digas.

—es tan lindo y tierno quiero comérmelo a besos. —estira los cachetes de mi bebé—

—dejalo comer tranquilo, si no come en sus horas se pone de mal humor.

—algo malo tenia que tener. —se encoje de hombros—es el hijo del diablo por ende algo malo tendria que cometer.

—es un niño y no porque sea hijo de el cometera locuras, es solo mi bebé y es el angelito mas lindo de todo el mundo.

—tienes miedo verdad?  No quieres acabar en el infierno?  Por eso te niegas a una posible relacion con el lucifer.

—siempre fuí una seguidora de tu papá osea Dios, siempre creí en el y en el cielo y siempre quise acabar en el cielo no en el infierno.

—es imposible acabar en el cielo cuando te acostaste con el rey del pecado, el te sedujo con sus tácticas uso su poder en ti tecnicamente hacerle caso fue un pase directo con el.

—una pregunta cuando mueres es verdad que vas  al cielo?

—si eres pura y estas arrepentida de corazon si vas....pero si no vas directo al infierno y como tecnicamente eres la casi "esposa" de lucifer creo tienes un pase en primera fila al infierno si.

—no soy su esposa.

—eres la madre de su hijo y el te quiere.

—eso no significa nada...

—lo que tu digas...

—sabes que no me caes verdad.

—no te caigo porque siempre tengo la razón.

—no es eso.

—claro que lo es, no quieras engañarme "cuñadita".

Iba a reprocharle su comentario pero ya no estaba, odio cuando aparecen y desaparecen.

—creo que solo somos tu y yo otra vez. —miro a mi hijo—

Donovan saca su mamila y suelta una risita antes de volver a meterla en su boca.

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Dejo el carrito cerca de una banca del parque y saco una manta poniendola en el piso para poder acomodar a donovan sin que se ensucie.

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