Triste [Terminada]

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Empecé a caminar sin rumbo, siempre me pregunté, habré hecho algo para que a nadie le caiga, para que a todos mi presencia le moleste? Siento un hombro contra mi frente, si me choqué con alguien, cuándo no estando distraida. Levanto mi cara, mateo mirándome

–Perdón, venía distraida

–Estás bien Oli?–Mira mis cachetes, se dió cuenta que lloré

–Si. Todo bien–Mentí, sabía que se daría cuenta

–Ya vengo chicos–Saluda a sus amigos. Me agarra la mano y subimos a su auto–Qué pasó? Peleaste con tu papá de nuevo?

–No, con la familia de mi papá. –Le tuve que contar, me quiero descargar.

–mira hermosa, sos igual a tu mamá, por eso no tengas dudas de que sos su hija. Después, si tu abuela no te quiere que se joda, vos tenés a tu mamá, a tu abuelo, a tu otra abuela, a tu tío, a tu tía, al tarado de tu novio y ahora lo tenés a tu papá. A mi familia ni la nombro porque es algo obvio eso jaja

–Ay Mateo sos tan bueno–Lo abrazo–Te quiero– sé que debí alejarme pero es que es la única persona a la que no me da vergüenza contarle mis problemas.

–Te amo princesa–Al separarnos me agarra el mentón y me besa. Después de un largo día, tengo derecho de despejarme no?

Se la seguí, me sentó sobre él, se desprendió el pantalón y me desprendió el único botón que tenía mi remera

–Mateo mateo mateo, está mal–Me separo

–Porqué? Si es por lo de tu novio, no lo pienso decir a nadie

–No, es que. Nos tenemos que alejar– Lo amo, me saca todo los problemas de la mente, tiene mágia este pibe

–Pero, no entiendo. Alejarno? Te lo pide tu novio?

–No, mis viejos. Es larga la historia. Pero no debemos seguir hablando, ni siquiera mirarnos como lo hacemos

–Y cómo nos miramos?

–Con deseo, con lujuria.

–No es mi culpa que seas inrresistible. Pero, no me quiero alejar.

–Ni yo. Pero creeme que lo tenemos que hacer.–Abro la puerta, saco un pie pero vuelvo a arrimar la puerta–Gracias por todo, sos lo más. –Le doy un beso de despedida y bajo. Cierro la puerta y comienzo a caminar.

Eran recién las 5 de la tarde, quiero ir a mi casa a ponerme a llorar. No me quiero alejar de él, no vamos a lastimar pero y si no lo hago puedo desepcionar a los demás.

–Hasta que llegaste hija–Habla Papá. Estaban mis tío, mi tía y mi abuelo.

–Si. Me quedé hablando por ahí

–Con quién?–Pregunta curiosa Julieta. Sabe que de no ser Javi es Mateo

–Con Javi–dejo de mirar a julieta para mirar a mis parientes– Ahhh no les conté–Se sientan– Tengo novio

–Ah si? Quién es?

–Es éste–le muestro una foto nuestra

–Apa, si que es lindo–Dicen mis tíos.

–y te hace feliz?– De la persona que lo hace me tuve que alejar

–Eh si.

–Hijita–Habla mi abuelo–Vinimos a pedirte perdón. No sabemos porqué te habló así ni porqué te dijo eso Estér, a nosotros no nos gustó ese comportamiento –asienten los demás– Discúlpala

–Abuelo, no es tu culpa, ni la de ellos–Miro a mis tíos– Mi abuela jamás me quizo, pero no se preocupen que no me gusta guardarle rencor a nadie–Se les aguaban los ojos– Sé lo que piensa de mi, y de mi mamá. Un día la escuché hablando con mis otros tíos

–Vos sabes que no es verdad?

–Si. Lo sé. Pero ellos no lo creen, y por eso no me quieren, en cambio ustedes, ustedes fuera o no hija de sangre de mi papá me van a querer, ustedes tienen el corazon blando, son muy buenos. Son la única familia que tengo después de mis papás. –Se me caen un par de lágrimas–Ja, y pensar que mi padrino no es una persona que no se preocupa por mi.

Uno de mis tíos que no vinieron es mi padrino. Jamás se interesó en mi.

–Oli. Siempre nos vas a tener para lo que quieras, y necesites. Y aunque mi mamá no lo demuestre en el fondo está orgullosa de tener una nieta tan buena persona, linda por dentro y por fuera.

–Gracias. Pero aprendí a que si alguien no me quiere, que me tiene que dar igual, y tratar de la misma forma que me tratan. Porque siempre necesitan alguna cosa de uno, y allí es cuando se arrepienten.

–Tenés razon amor–Dice mi tía–Ella teniando tantos nietos piensa que uno menos no hace la diferencia, pero no sabe que tiene que amarlos de la misma forma. Pero bueno, no te queremos recordar eso.

–Se quedan a cenar? –Pregunta mi mamá

Los 3 se miraron y asintieron

–Siiiiii–Parecía una nena chiquita.

–Ahhh. Lo que si va a venir alguien a cenar con nosotros.