NEVER NOT - KTH&JJK

12. Jungkook

Acabo de estacionarme frente a tu casa, Taehyung.

Tu mamá me saluda desde la puerta y yo le devuelvo el saludo.

Cuando sales por la puerta principal me ahogo con mi propia saliva.

Santa mierda.

Te has teñido de azul.

Joder.

Estás caminando hacia el coche y yo estoy seguro de que estoy viéndote en cámara lenta.

Estoy tan distraído que no me doy cuenta que tengo que desactivar el seguro de las puertas, y cuando entras al coche tu perfume inunda mis sentidos.

"¿Kook?"

"¿Si?"

"Ya podemos irnos"

Mierda.

"Claro" Enciendo el coche tan torpe como nunca. "Te queda bien el azul"

Estúpido, estúpido, estúpido
No se supone que tendría que decirte eso.

"Gracias, Kook"

En la fiesta, llamas la atención de la mayoría ahí, pero tu no te das cuenta.
Porque estás mirándome a mí, Tae.
Hoseok nos recibe con dos vasos llenos de bebidas de dudosa procedencia.
Cuando doy el primer sorbo tu ya vas por la mitad.

Comienza tu canción favorita y me arrastras contigo a bailar, te prometí que estaríamos juntos esta noche e intento no pensar quién podría estarnos observando, pues tu bailas con la espalda pegada a mi pecho.

No es un secreto lo que eres, Taehyung.

Pero yo no soy como tú.

¿Verdad?

Yo disfruto de la compañía de Somi y de vez en cuando de Suhee.
Porque es mejor.
Porque nadie va a cuestionarme nada.

Después de cinco o seis vasos más, puedo decir que estás ebrio.
Porque tus manos te traicionan e intentan tocarme más allá de mi cinturón mientras bailamos.
Yo las quito cada vez.
Sabes que no podemos hacer eso, Tae.
E incluso en tu borrachera, logras mirarme triste y con los ojos brillosos.
Y te vas, me dejas en medio de todos sin saber que hacer.

Voy detrás de ti cuando logro identificar una mata de cabello azul a unos metros en la cocina.
Hay tanta gente aquí dentro que apenas puedo pasar.

Estás con los chicos, así que me acerco a saludar.

"Jeon, ¿dónde has estado? Pensamos que no habían venido hasta que nos encontramos a Tae" Jimin me grita y yo leo sus labios porque no puedo escuchar ni una sola palabra gracias a la música. "Somi te ha estado buscando."

Tu me miras, y sé que estás esperando mi respuesta.

"Hola chicos" Saludo a todos con la mano y no reconozco a uno de ellos.

¿Y éste quién es?

"Este es Bogum, mi primo. Está en la facultad de medicina"

¿Y por qué está ofreciéndote otro vaso con quién sabe qué?

"Jungkook, haremos ronda de shots. Wonho ha aceptado tomarlos de cabeza, está loco. Les dije que vas a darle batalla a ese fanfarrón. Seguro toma uno y vomita, no puedes decepcionar hoy, además Somi estará ahí"

"Hoy no, Hoseok."

Tu le sonríes a ese tipo.
Es guapo e incluso más alto que yo.
El se inclina y se apoya en sus codos en la encimera mientras tu cruzas tu pierna sentado en el taburete.

¿Estás ligando con el?

"Dale Jungkook, solo uno" Y Yoongi me ruega.

Él toca tu mejilla con su sucia mano y está hablándote tan cerca que estoy seguro de que puedes oler su aliento a alcohol.

"¿Jungkook?" Yoongi parece darse cuenta de la dirección de mi mirada, pero ahora mismo me importa una mierda. "Deja a Tae. Bogum sabrá como quitarle el mal humor, ésta noche está insoportable, ni siquiera aceptó jugar. Vamos."

Yoongi y Namjoon me arrastran a la sala en donde todos están gritando como salvajes.

Wonho ya está de cabeza con una especie de manguera en la boca y gritan mi nombre para que haga lo mismo.

Logro verte apenas un poco, pues el idiota con el que estás ahora está entre tus piernas y no puedo ver tu rostro.

A la mierda.

Cedo y utilizo mis manos para balancearme, Somi me pasa la manguera y la coloca en mi boca no sin antes robarme un beso.

Uno, dos, tres

Cuentan en voz alta y siento el alcohol llegar a mi garganta, termino antes que Wonho y me pongo de pie, limpiando mi boca con el dorso de mi mano.

Están aplaudiendo y alabándome, no podría importarme menos.
Porque veo tus manos.
Estás tomándolo del cuello como lo haces conmigo cuando vas a besarme.
En tres segundos estoy ahí y sin pensarlo mucho, te arrastro fuera de la fiesta, te arrastro a mi coche y tu no das mucha pelea.

Yoongi y Jimin han salido también a ver que sucede, y aunque gritan nuestros nombres, ninguno de los dos se molesta a girarse.

De pronto estoy conduciendo a casa.
A mi casa, lejos de ese que quería meter las manos en tus pantalones.
Tu no haces más que cruzar los brazos en tu regazo y yo evito mirarte más de lo necesario.

Cuando llegamos a casa, tu bajas por tu propia cuenta y por eso tropiezas un poco antes de que llegue a ti y te sostenga.
Abrir la puerta es tan difícil contigo respirando en mi cuello y las escaleras parecen arenas movedizas en tus pies.
Logramos llegar a mi habitación y cierro la puerta detrás de mi y al parecer mi hermano se ha ido ésta noche también, pues su coche no estaba por ningún lado y no escucho los gritos y disparos de sus videojuegos.

Te dejo sobre el colchón, pero no me miras.
Así que me apoyo en mis rodillas para buscar tu mirada.
¿Qué mierda hice?
Dios, Jungkook.

Cuando por fin me miras, tus bonitos labios están en un puchero.

"Tae"

Me besas.
Ni siquiera lo esperaba y me balanceo un poco para mantener el equilibrio.
Tus manos están heladas y sosteniendo mis mejillas.
No sé qué está mal conmigo, porque ahora mismo siento que podría comerte a besos.
Aquí en mi habitación, solos tu y yo.
Creo que podría.

No lo pienso mucho, porque ahora estoy encima de ti, entre tus piernas y sosteniendo mi peso con los codos.
Te remueves debajo de mi y se me hace cada vez más difícil pensar claramente cuando siento tu entrepierna rozando la mía.

"Jungkook-ah"

Tu voz.
Tus manos en mi cabello.
Tus piernas apretándome para que no me escape de ti.
Tu perfume mezclado con alcohol y cigarrillos en el ambiente.
La oscuridad y el silencio de la noche.

¿Por qué esto se siente tan bien para ser tan malo?

Esto es incorrecto allá afuera, Tae.
Y se siente tan correcto cuando somos cómplices.
No hay manera humana en que alguien pueda detenernos.
Que pueda detenerme.