¿Tu me amas también? Vkook +18

El viaje.

Narrado por Jungkook:

Pasaron cinco días perfectamente comunes antes del viaje. Me despedí de Jimin, aunque sólo son cinco días es mi mejor amigo. No he hablado mucho con Tae, es difícil para mí. Me gusta, y temo que ahora que lo empiezo a conocer, me estoy enamorando de él.

Bueno, ¿qué puedo decir? Llegamos al aeropuerto a las 8:30a.m. Papá y mamá no nos acompañaron al aeropuerto, fuimos en taxi y ellos se despidieron de nosotros en la casa. 

En cuanto llegamos, fuimos a la sala de espera, faltaban 10 minutos para abordar. Tae sacó su celular y yo lo imité. No tenía nada mejor que hacer. Entonces llamaron a nuestro vuelo. Caminamos rápidamente y llegamos al avión. Teníamos boletos de primera clase, como le prometieron a papá. Yo elegí el lado del pasillo, la ventana me marea. Entró la azafata americana y empezó a explicar.

   - Cualquier orden que de la pantalla- señaló una pantalla sobre de ella- deben de acatarla. El vuelo dura 14 horas con 19 minutos aproximadamente. En unos minutos se servirá el desayuno, y a las 4 se servirá la comida. Por su atención, gracias.- reparó en mí, que la miraba con atención. Tengo que admitirlo, es bonita. Cabello castaño, alta, ojos claros como muchos norteamericanos, piel pálida. Es joven, no pasa de los 20. Me miró y me guiño un ojo, divertida.

Noté como Tae se tensaba junto a mí. Cuando vió que me guiñó el ojo, pasó su brazo por mi cadera, y acercó su boca a mi oído y susurró:

   - No tengo que recordarte que tienes dueño, Kookie.

Con su otra mano, tomó mi barbilla para que me dirigiera a él y me besó en los labios.

Sus celos, es muy lindo. 

De reojo pude ver cómo la azafata nos miraba, disgustada.

Después del beso, se irguió otra vez, pero sin quitar su mano de mi cadera. No pude evitar sonrojarme. Cuando Tae vió la coloración en mis mejillas, sonrió y pasó su frío nudillo por una de ellas. Me recargué en su hombro mientras él miraba un video en la pantalla de su asiento. Cerré mis ojos y suspiré.

   -¿Recuerdas que pedí una prueba de ADN, Kookie?- la voz de Tae me hizo despertar del      semi-sueño en el que estaba. Lo miré y asentí.

   - Bueno, sus resultados.- me mostró un archivo en su celular. Lo tomé, tembloroso.- ¿Ya viste?- miré la gráfica que incluía el archivo.

No había nada de coincidencia con el ADN de mi padre.